Todo era fiesta. Bateo oportuno, hits y hasta dos cuadrangulares. El marcador dictaba un triunfo hasta sencillo de Charros. El juego estaba 9-3 para los visitantes que imponían condiciones hasta que llegó un apagón que no solo dejó al estadio sin luz por 20 minutos, si no que extinguió también la luz del equipo que cayó en una serie de impresiones, tanto en el relevo como a la defensiva que permitió que Yaquis se levantara y le diera la vuelta ante una tribu que dejó congelados a los mariachis con victoria final de 10-9.
Todo pintaba bien desde la primera entrada. Alonzo Harris y José Manuel Rodríguez llegaron a la registradora y el juego se ponía 2-0. Manny Barreda, abridor de los visitantes, ponchaba a sus tres rivales.
Agustín Murillo, Harris, Rodríguez y Dariel Álvarez se combinaron para traer un rally de cuatro carreras al marcador para un 6-0 que reflejaba la superioridad en el diamante.
Los locales rompieron el cero en su turno al bat. Carlos Sepúlveda trajo el imparable para que Isaac Paredes.
La trama no cambiaba. El dominador era uno en el tercer inning. Agustín Murillo se voló la cerca y empujó a Harris para el 8-1.
Pero la tribu no quería ser apaleado en su casa. Anderson Hernández pegó imparable al central y dos rayitas entraban al marcador que se puso 8-3.
La cuarta entrada se fue en blanco y en la quinta un jonrón solitario de Urrutia ponía la novena carrera de Jalisco, que hasta este momento, era amplio superior.
Barreda se complicó en la lomita y Roberto Vizcarra mandó a Manuel Flores, quien heredó dos en base. Y se fue la luz en Ciudad Obregón. Una falla eléctrica dejó sin energía al estadio y zonas aledañas… y se hizo la luz para Yaquis. Tras 20 minutos detenido el juego, Flores recibió hit de Sepúlveda y se llenó la casa. Linder Castro tomó el lugar de Flores y recibió todo el poder de Yaquis con un Grand Slam de Moisés Gutiérrez que acercó a solo una carrera el juego. Jalisco quedó frío. El empate llegó en la sexta con un imparable de Carlos Sepúlveda y Ciudad Obregón era un hervidero.
Si había alguien que quería anotarle más que nadie a Charros era Leo Heras. En la octava, un elevado de Íker Franco hizo que Heras llegara barrido a home ante Gutiérrez. La jugada entró en revisión y tras un par de minutos se marcó safe en home y Yaquis ya ganaba 10-9.
Tras la decisión, Roberto Vizcarra salió disparado a reclamar a los ampayers, pero el daño estaba hecho, mientras se reproducía repetidamente “los mariachis callaron” en el sonido local.
Y sí, los mariachis callaron, pero también se apagaron y no existió reacción ante un equipo que ya demostró que lo que más le hierve es la sangre.
Hoy se juega el cuarto de la serie a las 20:10 horas, por Jalisco abre Will Oliver mientras que Francisco Rodríguez hará lo propio por Yaquis.
DATO
José Manuel Rodríguez salió del juego por precaución al resentirse de lesión muscular.
GPE