Fractal: 30 Concurso Internacional de Diseño de Joyería tiene ganadores. El certamen se realiza dentro del marco de JOYA, la exposición de piezas de joyería más importante de América Latina. Este año resultaron ganadores entre 161 propuestas: Alejandro Rodríguez Mendoza, originario de Guadalajara Jalisco, en la categoría Orfebre con la pieza “La Umilde”, mientras que Karina Guadalupe Hernández Aguilar, de la Ciudad de México ganó en la categoría Experimental con la pieza “Simplicidad en lo natural” y Sara Flores Espinosa, también de la Ciudad de México obtuvo el primer lugar en la categoría Digital con la pieza “Pisce”.
Organizado por la Cámara de Joyería Jalisco, el certamen tiene como objetivo incentivar el diseño de este sector. Es la segunda vez que, en los nueve años de trabajo del jalisciense Alejandro Rodríguez Mendoza, creador de la pieza “La Umilde”, gana este premio.
“Fue un mes entero de trabajo de forje en árbol en la pieza hecha de plata, oro de 22 kilates y 21 perlas. Tomé la inspiración de una mujer que conozco y quise plasmar en la joya lo que su belleza, su alma y su esencia evocan en mí. Es la tercera vez que participo. Gané en 2016 y esta vez sólo me hablaron de la Cámara de joyería para decirme: `Alejandro, volviste a ganar´”, dijo el premiado y añadió: “Se siente una gran satisfacción. Es como un estímulo para seguir trabajando en lo que me apasiona. Hace 9 años que me dedico a esto. Antes era diseñador gráfico, pero desde que vi como se hacía una joya me enamoré, mandé todo al ‘carajo’ y comencé a trabajar en mi taller”.
“A mí se me hace fantástico que la cámara abra este tipo de concursos porque en Guadalajara y todo México hay mucho talento que no tiene un nombre y este tipo de concursos le da a cada uno el reconocimiento que merece. Hay que regresarle el verdadero valor a lo que se hace con mucho esfuerzo. Las marcas poco a poco opacan el trabajo de los artesanos, pero esto aporta a reeducar al comprador”, comentó Rodríguez Mendoza y agregó: “Yo no me considero un joyero en sí, más bien soy una persona, un artesano que sabe trabajar la plata”.
Alejandro Rodríguez Mendoza es fundador de la escuela de joyería “925 Atelier” y creador de la marca exclusiva “Metamorfeame 925”, la cual se puede encontrar en Facebook e Instagram con ese mismo nombre.
Por otro lado Karina Guadalupe Hernández Aguilar, autora de “Simplicidad en lo natural”, comentó que los organizadores le pedían que su creación se integrara por un 50 por ciento de plata y 50 por ciento de materiales alternativos.
“Con la línea que he estado trabajando y parte de la formación de artista que tengo podía utilizar otros materiales, yo consideré materiales de reciclo, popotes de plástico, alfileres de costura y esponja de poliuretano. El resultado fue un prendedor. Me basé en la estética de los crisantemos debido a que el tema es Fractal y se habla de las formas infinitas de la naturaleza, proporción. Observé las flores y su composición y quise ejemplificar con mi pieza la construcción de una flor: Repetitiva, frágil, efímera”.
Hernández Aguilar dijo que se abre la posibilidad de realizar una colección con estos elementos. “En mi trabajo he tratado de replicar la geometría sagrada”.
La joven es artista visual por la Facultad de Arte y Diseño de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Orfebrería y Joyería en el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), dice que comenzó como joyera desde los 16 años y las disciplinas que más domina son la escultura y la gráfica, la cerámica, talla en madera, escultura en metal y el grabado en madera, linóleo y metal.
Comentó que el premio es una gran oportunidad para acercarse a este medio y saber cómo se construyen las nuevas oportunidades que tiene el gremio para hacer joyería de calidad.
Sara Flores Espinoza, autora de “Pisce”, comentó estar satisfecha de que sus piezas vayan a ser creadas en plata. Para la joven diseñadora es la primera experiencia dentro de un certamen de este tipo. Con 19 años a cuestas, trabajó en esta pieza durante un mes, comentó que la experiencia le ha gustado bastante.
“El hecho de haber ganado hace que mis expectativas para dedicarme a esto han subido hasta un 80 por ciento. Mi diseño está relacionado con las aletas pectorales de un pescado de Malawi, de África, decidí hacer aretes. Me basé en la forma, el color y el movimiento de la aleta de un pescado, es de plata con piedras color azul”. Es estudiante del segundo semestre de arquitectura de la UNAM y se cambiará a diseño industrial.
GPE