Lilia Ponce de León, coordinadora de ferias de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana, manifestó que “en el país todavía nos falta tener más gusto por la lectura, muchos de nosotros leemos porque nos interesa saber más sobre el tema en el que trabajamos, porque nos lo piden en la universidad, porque nos encargaron un trabajo; es decir, leemos mucho por cumplir con compromisos pero nos falta empezar a amar la lectura por el puritito gusto, crear una adicción por la lectura: que uno, al terminar un libro, ya esté buscando el que sigue. Nos falta un poquito, pero no perdemos las esperanzas”.
De visita en Puebla para la inauguración de la XXXI Feria Nacional del Libro (Fenali) de la UAP, la entrevistada agregó que para llegar a esa "adicción" a la lectura, nos falta "que desde pequeños los niños vean leer a sus papás. Claro que a todos nos interesa que nuestros hijos lean, pero debemos 'leer con el ejemplo' porque está comprobado que el rendimiento escolar de los niños es muchísimo mejor si son buenos lectores, pero hasta ahora no nos ven leer como papás, entonces debemos comenzar con ese disfrute en casa".
Al asegurar que para la cámara a la que representa "son muy importantes las ferias universitarias, porque este es un gran mercado, el de los jóvenes, el cual atendemos mucho" agregó que "a los niños hay que traerlos a estas ferias para que elijan su lectura también, porque ese es el mejor momento para fomentarla; si lo queremos hacer cuando ya están en la universidad, nos va a costar más trabajo. Hay que fomentar el hábito de la lectura pero con gozo, no por obligación, porque cuando se hacen las cosas por gozo, nadie necesita decirte que las hagas. Sólo así tendremos más lectores en el país y erradicaremos la ignorancia que tanto daño nos hace".
Finalmente aseguró que la Feria Internacional del Libro de Guadalajara "sigue siendo la más importante de Latinoamérica, y este año, con Portugal de país invitado termina 'llena'. Sigue habiendo lista de espera de los editores para participar en ella, porque siempre está rebosante, no sólo por los libros, sino porque la feria es toda la ciudad, con más de 600 presentaciones, un encuentro de bibliotecarios, de México y de Estados Unidos. Hay que ir, porque allá publicamos los resultados de las ferias, de la cámara que represento, es decir, que la lectura, los libros siguen y seguirán, que nada podrá sustituirlos".
AMV