Su presencia llama la atención de los jóvenes, si bien los niños apenas y conocen a esa figura que toma el escenario con un libro entre las manos. Pero es día festivo, andan de paseo con sus padres en la Plaza Principal de Tepic y se detienen ante esa carpa porque les dijeron que les “van a narrar un relato de lombrices, aunque es más bien un asunto acerca de la diversidad y el respeto.
Es la cantante Ely Guerra quien lee La prohibición de las lombrices, de Erika Zepeda, un libro publicado por el Instituto Nacional Electoral (INE) y que sirve “para promover el gusto por la lectura, incidir en la formación ciudadana de niños y niñas y en la difusión de los valores democráticos”.
“Este es un libro que habla de la igualdad de género”, explica la artista mientras acomoda a los pequeños al frente de ese escenario instalado en la plaza, “todos los niños y todas las niñas somos iguales, entonces no veo por qué no vaya a encantarles el libro”.
Y durante poco más de 45 minutos los mantiene atentos a la historia, reaccionan, participan directamente cuando Ely les pregunta algo de lo que acaba de contarles, sin importar tanto el fuerte sol que se observa fuera de la carpa, ni la vida cotidiana de la gente que, aunque sea día festivo, tiene que desarrollar sus actividades en el mercado, comprar o vender sus productos.
Una mañana en que la voz de Ely Guerra rompió con la rutina de la ciudad, aunque todo el Festival Letras en Tepic contribuyó a eso, pues casi al mismo tiempo, a unas cuantas cuadras, en la Plaza Bicentenario, había mesas de homenaje a Amado Nervo en el centenario de su fallecimiento, dentro de una conmemoración que seguramente seguirá, porque en el 2020 se cumplirán 150 años de su nacimiento.
RL
