El confinamiento por la pandemia de coronavirus podría estar relacionado con una actividad menor en casos de rayos a nivel mundial, entre 10 y 20 por ciento, según un estudio realizado por la Unión Geofísica Estadunidense (AGU, por su sigla en inglés).
El fenómeno se debe a que se redujo la "contaminación y el índice de aerosoles en gran parte de las regiones terrestres habitadas, así como en zonas oceánicas remotas", indica la investigación.
La actividad de los rayos, de acuerdo con los especialistas, responde a efectos termodinámicos y a la presencia de aerosoles en el ambiente. El confinamiento ofreció una especie de "experimento natural para estudiar la respuesta de los rayos" a nivel mundial.
La reducción fue analizada gracias a sistemas que vigilan la actividad de los rayos y comprendió un periodo de tres meses, de marzo a mayo de 2020, comparado con datos de cuatro años.
"Son evidentes reducciones de entre el 10 y 20 por ciento, dependiendo de cómo se cuenten los rayos. Las variaciones regionales en los rayos son generalmente consistentes con el análisis satelital".
Así, se encontró que la disminución de aerosoles en África, Europa y Asia derivó en menos casos de rayos; en contraste, se reportaron ligeros aumentos en gran parte de América.
Los especialistas señalaron que no solo se presentaron menos casos de rayos, sino que la fuerza de estos fue menor durante la pandemia y el tiempo contemplado del análisis.
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