El "boom" del consumo de aguacate mexicano en Estados Unidos dejó un saldo de mil 600 millones de dólares a los productores mexicanos en 2016, pero el incremento anual de las exportaciones de ese fruto al país vecino, ha provocado la devastación de miles de hectáreas de bosques templados en Michoacán para convertirlos en huertas aguacateras.
Expertos advierten que esa situación pone en riesgo al hábitat de hibernación de la mariposa Monarca, ya que el auge de ese fruto sigue en aumento. Tan solo este domingo, en Estados Unidos se consumieron 35 mil toneladas de aguacate mexicano durante las más de tres horas de transmisión de la edición 51 del Super Bowl, según estimaciones de la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (Apeam).
“El riesgo siempre es latente, porque mientras el cultivo sea rentable siempre va a existir la tentación de personas que quieran abrir nuevas huertas para incorporarse al negocio”, señaló Víctor Manuel Coria Ávalos, director de Coordinación y Vinculación Estatal del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap) de Michoacán.
El aguacate se introdujo a Michoacán en la década de 1960; actualmente, ese estado genera el 78 por ciento de la producción nacional, posicionando a México como el principal exportador de aguacate con un millón 467 mil 837 toneladas, de acuerdo con el Sistema de Información Agroalimentaria y Pesquera (Siap).
“Entre 1976 y 2000, más de 200 mil hectáreas de bosque templado y 300 mil de selva fueron desmontadas en Michoacán, entre 8 mil 500 y 12 mil 500 hectáreas por año en promedio (…) Aunque en un principio las plantaciones de aguacate se establecieron mediante la reconversión de cultivos anuales o de temporal, como el maíz y la papa, actualmente está desplazando al bosque de coníferas” indica el estudio “Impacto del cambio de uso de suelo forestal a huertos de aguacate”, elaborado por el Inifap.
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