El director general de Twitter Jack Dorsey defendió la decisión de la empresa de no censurar al defensor de las teorías de la conspiración Alex Jones y su programa Infowars, por considerar que no violó ninguna norma al tuitear, aunque otras redes sociales ya lo censuraron.
Facebook, Apple, YouTube y Spotify retiraron el material publicado por Jones, reflejando la aplicación más enérgica de sus políticas contra los mensajes de odio después de que creció la respuesta negativa online y la presión sobre Twitter para que hiciera lo mismo.
“No suspendimos a Alex Jones o Infowars ayer”, dijo Dorsey en una serie de tuits el martes en la noche. “Sabemos que es difícil para muchos, pero la razón es simple: no ha violado nuestras reglas. Lo haremos si lo hace”.
We didn’t suspend Alex Jones or Infowars yesterday. We know that’s hard for many but the reason is simple: he hasn’t violated our rules. We’ll enforce if he does. And we’ll continue to promote a healthy conversational environment by ensuring tweets aren’t artificially amplified.
— jack (@jack) August 8, 2018
Dorsey dijo que Twitter no desea “tomar una decisión que nos haga sentir bien en el corto plazo pero que alimente nuevas teorías de conspiración”.
Truth is we’ve been terrible at explaining our decisions in the past. We’re fixing that. We’re going to hold Jones to the same standard we hold to every account, not taking one-off actions to make us feel good in the short term, and adding fuel to new conspiracy theories.
— jack (@jack) August 8, 2018
Agregó que la empresa quiere evitar sucumbir a la presión externa, pero en su lugar aplica imparcialmente los principios “independientemente de puntos de vista políticos”.
If we succumb and simply react to outside pressure, rather than straightforward principles we enforce (and evolve) impartially regardless of political viewpoints, we become a service that’s constructed by our personal views that can swing in any direction. That’s not us.
— jack (@jack) August 8, 2018
Jones, quien tiene 858 mil seguidores en Twitter, ha ganado audiencia por sus teorías de la conspiración. Entre otras afirmaciones, asegura que los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 fueron llevados a cabo por el propio gobierno de Estados Unidos y que la masacre en la escuela primaria Sandy Hook en 2012, que dejó muertos a 20 niños y seis adultos, fue una farsa llevada a cabo por actores.
Él dice que sus afirmaciones están protegidas por la libertad de expresión.