Monterrey, Nuevo León /
A paso lento, con un maquillaje impecable y vestido negro, Queta acaparó las miradas de “los vivos” durante el desfile de catrinas que partió en calles del centro de Monterrey para recordar a los que se adelantaron en el camino.
El singular personaje, procedente del Pueblo Mágico de Mineral de Pozos, Guanajuato, es una catrina basada en Enriqueta Perkman de Villalba, una acaudalada mujer que vivió en el siglo XVIII y que llegó a tierras regias para recordar que la muerte es parte de la vida.
“Este personaje es de lo más emblemático de la historia minera. Es una señora empoderada, dueña de las tres minas más importantes de nuestro pueblo. Lleva vestuario del periodo del porfiriato, joyas de la época y su caracterización de rostro representa que está saliendo de la tumba y resurgiendo en la vida”, señaló Viridiana Beltrán, operadora turística del estado de Guanajuato.

Durante el recorrido, jóvenes, niños y niñas que le acompañaban caracterizados de la también llamada Calavera Garbancera, entonaron cantos alusivos al 2 de noviembre, fecha que se conmemora el Día de Difuntos.