Suspender el aumento en los precios de las gasolinas "por motivos electorales, sería otra bomba que puede estallar en las manos", advirtió la Arquidiócesis de México al criticar la elevada deuda que presentaron las finanzas públicas del país en el último trimestre de 2016.
En el editorial del semanario Desde la Fe titulado "Bomba de Tiempo", aseguró que el gobierno dice que toma medidas de austeridad, pero gasta fortunas en fiestas y premios mientras el pueblo sigue empobrecido.
TE RECOMENDAMOS: No habrá 'gasolinazo' de aquí al 17 de febrero
Explicó que tan solo el año pasado se derrochó, con cargo al erario, casi 30 mil millones de pesos para festejos y premios a servidores públicos "lo que prueba que hay muchos rubros para recortar".
En el último trimestre de 2016, dijo que se contabilizó una estratosférica deuda del sector público de más de 9 billones de pesos, que representa el presupuesto asignado a 17 dependencias públicas y mayor al presupuesto asignado a las secretarías de Salud y Educación para el ejercicio fiscal 2017.
La Arquidiócesis pidió apelar a la sensibilidad a fin de crear mejores condiciones de vida ante la inestabilidad económica y social que enfrenta el país.
"Las autoridades afirman que las medidas de austeridad, la evolución del tipo de cambio y del precio internacional de la gasolina, han creado las condiciones para mantener sin cambios los precios máximos, pero en pocos días, México no tiene refinerías, como por arte de magia ni ha dejado de importar gasolinas del exterior", puntualizó.
Por lo cual no "sería justo distraer la opinión pública dilatando gasolinazos ante las elecciones próximas, particularmente en el Estado de México, poniendo en riesgo la victoria del partido dominante".
AER
