El Instituto Estatal de las Mujeres lanzó una recomendación a las autoridades y organizaciones de la sociedad civil en general, a no utilizar en sus campañas imágenes o fotografías que remitan justamente a la violencia de género.
Tras conmemorarse este 25 de noviembre el día de la No Violencia contra las Mujeres, y el arranque de los 16 días de activismo en relación al tema, se invitó a la reflexión sobre el mejor modo de sumarse a esta cruzada, sin caer en estereotipos que no contribuyen a prevenir, atender, sancionar y eliminar éste fenómeno.
Este miércoles, las diputadas de la LXXIV Legislatura al Congreso del Estado realizaron una exposición con fotografías en las que aparecen con sus rostros maquillados a manera de golpes, una situación que no es recomendada como actividad que promueva la no violencia.
"... por desconocimiento del abordaje adecuado, la gran mayoría de esas propuestas muestra frases, imágenes o una combinación de ambos, donde aparecen mujeres con actitud sumisa, maltratada, con miedo, impotente o amordazada ante el maltrato. O bien, son mensajes bien intencionados pero con una visión reduccionista, biologicista, paternalista, con tintes de religiosidad o revictimizadora, que refuerzan los estereotipos que se pretenden eliminar.
"Todo ello no ayuda a desalentar la violencia: al contrario, la normaliza al mostrarla constantemente, puede reforzar el problema que se pretende erradicar y logra lo que se llama un efecto boomerang", destacan.
El posicionamiento, emitido por la coordinación de Comunicación del IEMujeres, señala que lo recomendable en las campañas de difusión es enfocarse en la asertividad y creatividad, recordando a la sociedad los distintos tipos de violencia, los ámbitos y el contexto en que se manifiesta, y sobre todo, lo que es: una grave violación a los derechos humanos.
Estas recomendaciones, señalan, tienen su origen en la "Normativa en materia de Derechos Humanos para el manejo de una imagen digna de las mujeres", de la Organización de las Naciones Unidas, que tiene su origen en la Plataforma de Acción de Beijing.
En ella, aseguran, los gobiernos tienen la obligación de fomentar una imagen equilibrada y no estereotipada de la mujer.
"... alentar la creación y la utilización de imágenes no estereotipadas, equilibradas y diferenciadas de la mujer en los medios de difusión. Que los gobiernos, organismos públicos y privados se abstengan de presentar a la mujer como víctima, como un ser inferior, de explotarla como objeto sexual y de consumo, en lugar de presentarla como un ser humano creativo, agente principal, contribuyente y beneficiaria del proceso de desarrollo (...) evitar los estereotipos sexistas que se presentan en los medios, por ser discriminatorios y degradantes para la mujer", concluye.