A sus 44 años, Alejandro Moreno Cárdenas (Campeche, 1975) aspira a dirigir el Partido Revolucionario Institucional (PRI), que enfrenta la peor crisis de su historia en sus nueve décadas de vida.
El gobernador con licencia enfrenta dos retos: el de la credibilidad ante algunos militantes tricolores, que lo acusan de ser el abanderado del presidente, Andrés Manuel López Obrador, y también el de la unidad, pues los que cuestionan su candidatura han decidido abstenerse participar en el proceso interno del partido.
Descrito por el ex presidente Enrique Peña Nieto como una persona “tenaz, perseverante, verdaderamente insistente”, tanto que “podría matar un burro a pellizcos porque es así de tenaz”, ha estado en los grandes grupos del priismo de los pasados 20 años.
Luego de hacer carrera política en su entidad, como auxiliar técnico del rector de la Universidad Autónoma de Campeche, coordinador de giras del presidente del Congreso de estatal y síndico de la ciudad capital, saltó en 2003 a una curul en San Lázaro integrando seis comisiones legislativas.
De la mano del entonces presidente del PRI, Roberto Madrazo, encabezó el Frente Juvenil Revolucionario, encargado de la formación de nuevos cuadros políticos.
En 2006 arribó al Senado. Su coordinador Manlio Fabio Beltrones lo designó integrante de seis comisiones legislativas. Al terminar su periodo legislativo en 2012 regresó de nuevo a San Lázaro con Beltrones y fue designado presidente de la Comisión de Gobernación, donde fue factor para la aprobación de las reformas estructurales devenidas del Pacto por México.
En 2015 arrasó en la elección en Campeche manteniendo el bastión del PRI; el 16 de septiembre de ese mismo año asumió el cargo. A finales de 2018 fue electo líder de la Conago desde donde mantuvo una relación institucional con el presidente López Obrador.
Dentro del PRI ha ocupado los cargos de operación más importantes, como son secretario de Organización y de Operación Política.
Se prevé que Moreno Cárdenas acuda este sábado al registro de aspirantes a la dirigencia nacional del PRI. Además del gobernador con licencia de Campeche han manifestado su interés los ex gobernadores de Yucatán Ivonne Ortega y de Oaxaca Ulises Ruiz.
El método que acordó la dirigencia nacional del PRI es abierto, es decir, se realizará una elección con voto libre, secreto y directo en todo el país para elegir al sustituto de Claudia Ruiz Massieu.
La elección será el 19 de agosto y una semana después tomará el cargo el nuevo dirigente tricolor.
En el marco de la elección interna del PRI para renovar la dirigencia nacional, el Instituto Nacional Electoral (INE) terminó la consulta solicitada por ese partido, donde verificó que tiene 6.7 millones de militantes.
“Es importante precisar que la validación, actualización y depuración de los padrones de militantes de los partidos políticos no las realiza el INE, sino que es responsabilidad de los propios institutos políticos”, subrayó el instituto electoral.
Recordó que este procedimiento se realizó tras la solicitud del PRI, el pasado 13 de junio, y cuyo procedimiento fue el siguiente: recibió los listados de militantes del PRI. Los datos se cotejaron con la base de datos del padrón electoral a cargo de la Dirección Ejecutiva del Registro Federal de Electores.
Después, la dirección Ejecutiva de Prerrogativas y Partidos Políticos verificó que de esos registros en el padrón electoral federal, no hubiera repeticiones.