El Programa de Resultados Electorales Preliminares, mejor conocido como PREP, es un mecanismo informático diseñado para dar confianza y certeza a la ciudadanía y a los actores políticos sobre los resultados el día de la elección una vez que cierran las casillas.
El PREP tiene al menos dos décadas de ser utilizado como parte del blindaje de nuestro incipiente sistema democrático y fue creado a raíz de un episodio -que enmarca justo lo que la democracia no es- conocido históricamente como “la caída del sistema”, que marcó la crisis de fin de siglo del partido hegemónico en el poder, el PRI.
En 1988 nuestro país se encontraba en un proceso de transición; finalizaba la gestión de Miguel de la Madrid, ya con muestras de descontento de la sociedad como resultado de la apertura de México al mundo, que le permitió conocer de los cambios sociales en la arena internacional. Vino entonces una mayor crítica al sistema autoritario ejercido por el PRI.
- Carlos Salinas, candidato del PRI; Cuauhtémoc Cárdenas, de la coalición del Frente Democrático Nacional (FDN) y del Partido Mexicano Socialista (PMS) y Manuel J. Clouthier, del Partido Acción Nacional, contendían por la presidencia de la República.
En esa época nuestro sistema político dejaba en manos de la Comisión Federal Electoral la calificación y validación de la elección; el gobierno era juez y parte en el proceso, lo que luego derivó en la indignación de la ciudadanía que calificó la elección como un verdadero fraude.
El 6 de julio de aquel año hubo un lento proceso de difusión del cómputo realizado por las autoridades electorales. Diferentes actores políticos y académicos coinciden en mencionar que Cárdenas se encontraba a la cabeza cuando de pronto el sistema se detuvo, y al reanudarse ya Salinas de Gortari había desplazado al ingeniero gracias al voto rural.
La de 1988 fue una elección con graves problemas poselectorales y con muchos desencuentros que permitieron que los partidos políticos marginados durante el régimen exigieran un cambio en las reglas del juego: modificar las leyes electorales para tener procesos imparciales, legales, transparentes y legítimos.
Parte de esos cambios está relacionada con el PREP, que en 1994 operó por primera vez. En la actualidad el Programa de Resultados Electorales Preliminares es muy importante, pues es a través de este sistema informático que se tienen resultados previos durante la elección.
Así, una vez que las casillas cierran, se cuentan los votos y se llena el acta de escrutinio y cómputo por parte de los y las funcionarias de mesa directiva de casilla. Los resultados se capturan, digitalizan y publican.
Para su diseño, el PREP se apoya de un comité técnico asesor con especialistas en materia de seguridad de la información, tecnologías de la información y estadística, y en su operación intervienen más de cinco mil personas previamente capacitadas.
Su correcto funcionamiento da certeza a quienes participan en la contienda, a los partidos políticos, a la autoridad electoral que lo implementa y a la ciudadanía respecto de la trazabilidad de su voto.
En la elección de este 2021 se procesarán aproximadamente 20,020 actas de escrutinio y cómputo. El PREP tendrá un costo de casi 29 millones de pesos que, divididos entre el número de ciudadanos y ciudadanas en la lista nominal con corte al 31 de enero pasado, que es de 12 millones 260 mil 567, el costo del PREP representa 2.38 pesos por cada mexiquense.
Explicar cómo surgió, cómo funciona y para qué sirve es una tarea vital, parte del necesario involucramiento de la ciudadanía en los asuntos públicos, más aún en los relacionados con la renovación del poder a través de las elecciones.