Después de doce horas de discusión, la Cámara de Diputados aprobó en lo general y en lo particular las reformas al Pensionissste para convertir dicha Afore en una empresa paraestatal "cien por ciento propiedad del Estado".
El pleno desechó 117 reservas presentadas por diputados de Morena, PRD y MC, y admitió solamente una del legislador Abdies Pineda Morín, de Encuentro Social, para asegurar que la nueva Afore cubra a los trabajadores las minusvalías o pérdidas en inversiones en los mismos términos que lo hacen las instituciones privadas.
El proyecto fue turnado al Senado de la República para su análisis y eventual ratificación.
Durante la discusión en lo general, el priista Jericó Abramo acusó a los adversarios políticos de su partido de mentir, de engañar y de generar odio con el discurso de la privatización: "en esta tribuna les digo, amigas y amigos, a esos que vienen aquí a decir muchísimas mentiras, ¡fuera máscaras!".
El panista Herminio Corral negó igualmente cualquier posibilidad de privatizar la Afore y fundamentó el respaldo de su bancada al dictamen como oposición responsable y sin regatear el apoyo a una propuesta del Ejecutivo en beneficio de los trabajadores, dijo.
A su vez, la perredista Lucía Meza señaló a los diputados del PRI y a sus aliados como traidores a los intereses de los trabajadores, e insistió en denunciar un presunto atraco a las pensiones del personal al servicio del Estado.
El coordinador neoaliancista Alfredo Valles convocó a velar por la seguridad social como derecho humano fundamental, al tiempo de respaldar la reforma al Pensionissste para preservar esa Afore y garantizar que los ahorros de los trabajadores se administren con eficiencia, honestidad y transparencia.
Abdies Pineda Morín, vicecoordinador de Encuentro Social, manifestó un voto de confianza al Estado mexicano para administrar los ahorros de sus trabajadores y, por medio de la nueva empresa paraestatal, asegurarles una pensión lo más cercana posible a su sueldo como personal en activo.