La Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) validó el procedimiento para la elección de las directivas sindicales a través de las modalidades de votación directa y secreta o indirecta y secreta, que establece el artículo 371, fracción IX, de la Ley Federal del Trabajo.
Por unanimidad, la Sala resolvió que dicho precepto no trasgrede los principios democráticos, ni la libertad y autonomía sindicales, reconocidos en la Constitución Política y en instrumentos internacionales ratificados por el Estado Mexicano.
El asunto fue abordado, debido a los amparos promovidos por diversos sindicatos en diversos estados del país, donde demandaban la inconstitucionalidad del mencionado artículo.
Los ministros dijeron que el artículo 371 tuvo como finalidad respetar el imperativo constitucional de garantizar la libertad sindical, con el objeto de que las organizaciones sindicales pudieran elegir entre las opciones de votación democráticas que mejor se adecuen a sus necesidades y características.
Consideraron que no es posible sostener que la votación indirecta sea un método de elección prohibido en la Constitución, ni mucho menos que ésta exija como único sistema de votación, para elegir dirigentes en las distintas organizaciones, entre ellas las sindicales, el sistema de voto directo.
"...pues debe tenerse en cuenta que en materia de organización política se ha estimado que la calidad democrática de un sistema es una cuestión de grado, en la cual tienen cabida distintos modelos, con la condición de que respeten el derecho de todo agremiado a participar en la elección de sus representantes en condiciones de libertad".
