Con el frío que trae el invierno, llega también el antojo de las tradicionales bebidas calientes que dan un apapacho al corazón, entre ellas, el atole y el champurrado que se compran comúnmente en los puestecitos instalados por las calles de Guadalajara en las mañanas, pero que son una cálida forma de empezar el día.
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“La preparación lleva su leche, su maicena, canela, vainilla, azúcar si hay vainilla, fresa, coco, nuez referente al atole, el champurrado lleva su chocolate, su masita, canela, vainilla azúcar”, explicó Irma Arias, quien vende atole y champurrado desde hace 10 años en Tlaquepaque.
En esta temporada navideña, el coctel navideño más popular en México, es el ponche, que se elabora con una variedad de frutas nacionales, como tejocotes, guayaba, manzanas y peras, aderezado con ron u otro licor después de que la fruta haya hervido en la estufa. Una vez que se ha enfriado, las especias aromáticas de este ponche navideño lo harán sentir festivo.
Pero si de tradición se trata, el chocolate caliente ha sido parte de la cultura desde el imperio maya y azteca, por ellos en estas fechas, usted puede saborear la calidez y los aromas del cacao con su toque extra de canela, chiles y hasta acompañarlo con pan dulce.
Cual sea la bebida, lo importante es compartir con los suyos y aprovechar para saborear estos típicos brebajes mexicanos que dan un abrazo al espíritu.
MC
