El Tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-Mec) brinda certeza a las empresas exportadoras; sin embargo, es complicado que por sí solo logre reactivar la economía a partir de la llegada de nuevas inversiones ante los discursos contra los integrantes de la iniciativa privada, explicó Beatriz Leycegui Gardoqui, ex subsecretaria de Comercio Internacional de la Secretaria de Economía.
Durante el webinar “El futuro del comercio exterior y las fronteras” organizado por la Universidad de las Américas Puebla (Udlap), Leycegui Gardoqui comentó que se piensa que el T-Mec tendrá un gran impacto económico en México; sin embargo, en la realidad, en el corto plazo no se notarán grandes cambios.
“La realidad, tomando en cuenta, al Fondo Monetario Internacional y a la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos, es que ese impacto será imperceptible y no significativo, y en todo caso se verá a largo plazo. Para México y Canadá los incrementos son pequeños”, explicó.
La especialista en comercio internacionales resaltó que el T-Mec es positivo para México porque se trata de una continuación del Tratado de Libre Comercio (TLC) que permitió el comercio de bienes entre las tres naciones participantes.
“No habrá efectos positivos en el corto plazo. Esto no significa que sea un mal acuerdo, lo que pasa es que es una continuación de un tratado que ya teníamos y que ya llevamos 25 años bajo este, donde se liberalizó completamente el comercio de bienes, entonces eso explica por qué el impacto no será tan fuerte”, explicó.
Comentó que es un mito que el T-MEC, por sí solo, reactivará las economías de los tres países y atraerá inversiones, porque se debe acompañar de otras acciones para lograrlo, como dar certidumbre a las inversiones.
“Esto hay que tomarlo con cuidado, si bien el tratado es relevante para atraer la inversión, deben existir otras condiciones y es que es necesario que cambie el discurso contra los del capital, que haya un cumplimiento con el marco legal, en particular los contratos negociados con el gobierno y también se requieren políticas públicas internas que promuevan el crecimiento económico”, explicó.
En su participación en el foro virtual organizado por la UDLAP, Leycegui Gardoqui resaltó que, en general, el T-Mec trae beneficios como dar certidumbre a las empresas exportadoras y México mantendrá su relación comercial con su vecino del norte.
“En general, brinda mayor certidumbre a los actores económicos y establece obligaciones de largo plazo aplicables a las partes en el comercio de bienes servicios e inversiones. La otra ventaja muy importante es que México es uno de los pocos países que ha logrado acomodar su comercio con Estados Unidos”, apuntó.
Desde el punto de vista laboral, la exfuncionaria federal resaltó que existe la posibilidad de que los trabajadores cuenten con una mayor protección y que la industria automotriz impulse más la producción en la región.
“En materia laboral es previsible que haya mayor protección a los trabajadores en México y en la industria automotriz se está demandando que se produzca más en la región para tener las preferencias del tratado”, finalizó.
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