El 95% de los establecimientos dedicados a la venta de alimentos y restaurantes de esta ciudad, ya están al corriente en los trámites para que puedan reactivar sus ventas, que, por la baja registrada en días pasados, causó que cerrarán temporalmente sus instalaciones y ahora al reiniciar actividades, tengan que saldar pendientes como deudas de renta o con proveedores, informó el representante de la red de restaurantes locales, Juan Manuel Méndez Lezama.
Una de las situaciones más comunes que se ha presentado, es que muchos restauranteros lograron convenios con sus arrendadores y les permitieron que una vez que se recuperan en las ventas, comenzarán a pagar los meses vencidos, lo cual ha hecho que, de los 54 restaurantes adheridos, solo uno haya cerrado definitivamente y otros más cambiaron su ubicación para continuar trabajando.
El desarrollo de las actividades económicas en el municipio implica que se deben adecuar esos establecimientos a los nuevos lineamientos que marca la autoridad, por ese motivo les han hecho hincapié para que cuenten con sus códigos QR que les permita tener un registro ante la autoridad federal y con ello mantener su continuidad de operaciones.
Dentro de las actividades que consideran podían causar un repunte entre los restaurantes, es la temporada gastronómica del mole de caderas, la cual en los dos últimos años se mantuvo sin un crecimiento considerable, solo fueron algunos restaurantes los que tuvieron mayor cantidad de ventas que otros.
Para este año consideran que los factores económicos y de la pandemia influirán de manera importante y podrían verse a la baja, porque no está llegando la cantidad de comensales que años atrás recibían, su ausencia se debe a que están cuidando su salud para no contraer el covid-19.
AFM
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