Tres hombres fueron detenidos y vinculados a proceso por el delito de robo con violencia en la residencia del influencer Alfredo Valenzuela en el municipio de San Pedro Garza García, Nuevo León.
El crimen ocurrió el pasado 22 de junio en el domicilio del creador de contenido ubicado en la colonia Olinalá, en donde delincuentes lo despojaron de un Lamborghini, relojes, joyería y dinero en efectivo que ascendería a más de 20 millones de pesos.
A casi dos meses de los hechos, la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León informó de la vinculación a proceso de Lucio "N", Sergio "N" y Jonathan "N" luego de que los datos de prueba expuestos acreditan su presunta participación en el delito.
Los tres hombres permanecerán en prisión preventiva con internamiento en un Centro de Reinserción Social Estatal.
Asimismo, las autoridades fijaron un plazo de dos meses para el cierre de la investigación complementaria.
Cómo ocurrió el asalto en la residencia de Alfredo Valenzuela
El creador de contenido en redes sociales denunció que cuatro o cinco sujetos fuertemente armados lo asaltaron a él y a su pareja en su propia residencia, de exclusivo sector en el municipio de San Pedro Garza García, Nuevo León.
Afirmó que los delincuentes les robaron una camioneta Lamborghini celeste valuada en más de seis millones de pesos, tres relojes de alta gama, joyería diversa y un millón de pesos en efectivo.
Las autoridades indagan cómo fue que ingresaron los asaltantes, pues la vivienda se ubica en una colonia privada, que cuenta con vigilancia y una caseta de acceso.
Los hechos ocurrieron durante los primeros minutos del lunes 23 de junio en un domicilio de las calles Mezquite y Álamo, en la colonia Olinalá, en lo alto de la Sierra Madre.
Alfredo Valenzuela, de 32 años, denunció que los cuatro o cinco sujetos armados vestían ropa camuflada, aunque dijo ante las autoridades desconocer el tipo y cantidad de vehículos en los que arribaron.
Declaró ante la policía que su pareja estaba realizando una transmisión en vivo en redes sociales, cuando de pronto escuchó que ella gritó al ser amagada por una persona armada.
Los delincuentes los encerraron en uno de los cuartos, los amenazaron con arma de fuego y le cuestionaron en dónde estaban la caja fuerte, las joyas y el dinero.
Tras lograr su propósito los maleantes salieron rápidamente y volvieron a burlar a los guardias de la caseta de seguridad que se ubica en el acceso del fraccionamiento.
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