Alrededor de 300 elementos de seguridad, tanto federales como estatales, ingresaron a territorio del crimen organizado en el municipio de Tangamandapio, Michoacán.
Los policías instalaron dos bases de operaciones interinstitucionales permanentes para brindar protección a cinco mil habitantes de Tarecuato.
La primera orden que recibieron soldados, elementos de la Guardia Nacional y policiales estatales fue buscar a los agresores de la masacre del lunes, donde once personas fueron asesinadas, entre ellos seis menores de edad.
En tanto, la comunidad Purépecha de Tarecuato, lugar donde nacieron todas las víctimas, la población exige justicia. Desde el lunes 1 de noviembre, la gente mostró su irritación porque, indicaron, personas trabajadoras e inocentes fueron asesinadas.
Por ellos, se reportaron incendios en al menos tres vehículos y un bloqueo en la carretera Los Reyes-Jacona como forma de protesta. Durante las últimas horas, las fuerzas de seguridad lograron liberar la carretera a la altura de Tarecuato.
La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado informó que el despliegue operativo tiene como propósito generar las condiciones de seguridad y paz social.
Mediante un comunicado, la misma dependencia estatal remarcó que existe el compromiso de otorgar resultados en poco tiempo. Sin embargo, la Fiscalía de Michoacán no ha logrado detener a los agresores ni ha dado a conocer a que grupo delictivo pertenecen.
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