La clínica Sedu, donde murió una mujer en una cirugía plástica, sí es un centro autorizado por las autoridades sanitarias para efectuar este tipo de operaciones; sin embargo, el médico que practicó la intervención no tenía licencia de cirujano plástico.
Lo anterior fue informado por autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
En el portal de Regulación Sanitaria de la Secretaría de Salud, la clínica aparece como centro autorizado para efectuar operaciones estéticas.
Ésta cuenta con la licencia 192003019, expedida el 19 de marzo de 2003 y con vigencia indeterminada.
No obstante, Jesús Enrique Sepúlveda Durán, quien realizó la operación, sólo cuenta con licencia de médico cirujano partero, y no de cirujano plástico.
En su declaración, el doctor argumentó que fue un paro cardíaco lo que terminó con la vida de Enriqueta Margarita Reyna Sáenz, de 45 años.
