Angélica López, quien fue detenida en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México por presuntamente transportar tres kilos de cocaína en su maleta, aseguró que la vida en un penal de máxima seguridad es "un infierno" porque la trataron "como si fuera de las peores delincuentes".
"Fue un infierno porque ahí no somos nada; violan nuestros derechos como seres humanos, no pude hablar con mi familia para saber qué estaba pasando; me estaba volviendo loca", dijo en entrevista con Joaquín López Dóriga para Radio Fórmula.
La joven bailarina aseguró que las autoridades le avisaron de qué delito la acusaban hasta que ingresó al penal federal de Tepic y acusó que estuvo aislada durante tres meses sin poder ver a algún miembro de su familia.
"Hasta que llego a Tepic me dicen de qué se me está acusando. Me tiene incomunicada tres meses y ya después me fue a visitar mi mamá", dijo.
Acusó que su traslado al penal de Santa Martha Acatitla fue con "violencia" debido a que la trataron como si fuera una delincuente.
"Me trasladan como si fuera de las peores delincuentes, con mucha seguridad, con hombres armados, encapuchados, con muchos gritos, con violencia como si yo fuera de las peores delincuentes, con los ojos vendados y esposada", dijo.
Exigió a las autoridades se haga justicia en su caso ya que en los más de siete meses que lleva detenida no tiene ninguna prueba o acusación en su contra.
El 31 de diciembre, Angélica López regresó a la Ciudad de México después de hacer un casting para ingresar a una escuela de danza en Colombia. En el AICM fue detenida por presuntamente transportar tres kilos de cocaína en su maleta.
