A sólo días de arrancar, a la nueva estrategia de seguridad en Guerrero se integraron agentes de corporaciones de seguridad pública municipal, estatal y federal.
Éstas colaborarán con las Bases de Operaciones Mixtas Especiales administradas por el Ejército Mexicano en los municipios de Chilapa, Acapulco, Chilpancingo, Iguala, Coyuca de Benitez y Zihuatanejo para la planeación y ejecución de trabajos de inteligencia y combate al crimen organizado.
Estas demarcaciones son consideradas como las más violentas del estado.
"El objetivo final de estos operativos, en la nueva estrategia de seguridad en los cinco municipios, es reducir al máximo las actividades delictivas que generan violencia y reducirla", dijo el comandante de la IX Región Militar, general de división Alejandro Saavedra Hernández.
"Que las policías (municipales) empiecen a trabajar en la actividad preventiva como son robos a casas habitación, asaltos y extorsiones, que empiecen a trabajar contra estas actividades que son delitos patrimoniales que son responsabilidad del estado y del municipio", dijo.
Detalló que los municipios de Acapulco, Coyuca de Benítez y Zihuatanejo estará a cargo la 27 Zona Militar y en el caso de Iguala, Chilapa y Chilpancingo la 35. Ahí se integraron bases de operaciones con entre 30 y 60 elementos.
Además, para operativos especiales se desplegarán entre 300 y 600 elementos adicionales de la Sedena, Semar, Gendarmería y Policía Federal.
Entrevistado en Acapulco durante un operativo en un merado, donde se tienen reportes de extorsión, el jefe militar insistió en impulsar las actividades que realicen los elementos de las policías municipales para que nuevamente recuperen la confianza de la ciudadanía.
ERM