Arturo García, alcalde de Jalapa de Díaz, Oaxaca, fue ejecutado a balazos en medio del festejo navideño organizado por el Sistema de Desarrollo Integral de la Familia (DIF) ante su esposa e hijos, confirmó la Fiscalía de Justicia del estado.
De acuerdo con los primeros reportes, en el ataque también fue asesinado el síndico municipal, Javier Terrero.
El senador Salomón Jara Cruz condenó la ejecución de ambos funcionarios y aseguró que los elementos estatales de seguridad hicieron caso omiso a las denuncias de García Velázquez, quien señalaba que había una persecución en su contra.
En octubre, el presidente municipal, junto con otras nueve personas, entre ellas sus comandantes de la policía municipal, fueron detenidos por elementos de la Fiscalía de Oaxaca por su presunta participación en desaparición forzada.
En su domicilio, las fuerzas de seguridad estatal y la Guardia Nacional hallaron un arsenal, por lo que fue detenido, pero el señalamiento después fue refutado por los diputados de Morena de ser un montaje de parte de la Fiscalía y un juez lo liberó.
Otras seis personas fueron asesinadas en diversos ataques perpetrados por el crimen.
En la carretera a Monclova, Coahuila, fue hallado el cuerpo de Juan Manuel “N”, de 65 años, quien se desempeñaba como titular de la Promotora para el Desarrollo Rural estatal.
El funcionario presentaba heridas de arma punzocortante y su cuerpo fue abandonado al interior de un remolque de caballos. En Tijuana, Baja California, se cometieron nueve homicidios, una mujer y ocho hombres, de acuerdo a la Fiscalía del estado. En Chihuahua abatieron a tres mujeres; en QR, cuatro; Guerrero, dos, y en Tamaulipas, un estadunidense que se encontraba en la fila para cruzar por el puente internacional Reynosa-Hidalgo fue ejecutado.
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