Un trágico accidente se registró durante la noche del pasado domingo cuando elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Atotonilco de Tula y paramédicos Protección Civil atendieron un reporte que alertaba sobre un incidente ocurrido en la Plaza Loreto Toscana Alta, del fraccionamiento Paseos de la Pradera.
En el lugar indicado, se localizó una camioneta Dodge Ram con plataforma con placas de circulacion del Servicio Público Federal, la cual sus llantas delanteras quedaron volando pues la unidad estaba a punto de caerse a un voladero.
A unos cuantos metros de distancia se localizó el cuerpo sin vida de un masculino, identificado posteriormente con las iniciales A.A.M.P., de 54 años de edad. Según versiones de vecinos, la camioneta le pasó por encima, antes de que la misma quedara a punto de caer al barranco.
De acuerdo con la narrativa del hecho, que ocurrió durante la noche de ayer domingo 10 de diciembre en Atotonilco de Tula, el hombre fue embestido de manera hasta el momento desconocida por la parte frontal y las llantas de su Dodge RAM 450 tipo plataforma, misma que estaba cargada con materiales, probablemente de construcción.
Por el violento choque, el cuerpo del hombre, de quien se dijo tenía 54 años de edad, quedó sobre una banqueta metros atrás de la camioneta de carga, identificada con las placas de circulación 42-EA- 7D, y de ello quedó con una fuerte herida en su espalda, lo que pudo haber sido la causa de que muriera casi al instante.

Mientras que el automotor se enfiló por la calle hasta que detuvo su marcha de manera violenta en el voladero, donde las llantas que antes aplastaran al hombre quedaron volando, con riesgo de caer.
En ese sentido, en el lugar del accidente los servicios de emergencia encontraron a una mujer, quien dijo ser pareja del fallecido y añadió que era vecino del fraccionamiento Toscana Alta, ella refirió que era quien venía conduciendo la cam, aunque no pudo precisar la manera en la que ocurrieron los hechos.
Por lo que solamente fue levantado un acordonamiento por parte de la Policía municipal de Atotonilco de Tula, quienes esperaron el arribo de peritos especializados de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) que se encargaron de recabar pruebas y testimonios, así como el cadáver para estudiarlo.