Agentes del Instituto Nacional de Migración habrían participaron en la desaparición de Maximiliano Gordillo Martínez hace tres meses cuando pasaba por la localidad de Chablé, en el municipio de Emiliano Zapata, Tabasco, acusó Arturo Gordillo, papá del joven.
"Junto con él fueron bajados del camión seis muchachos más que no llevaban credencial de elector, sino únicamente presentaron su acta de nacimiento y CURP. Desde entonces, lo hemos buscado en Tabasco, principalmente en hospitales y panteones, además de estar atentos a todas las notas informativas de personas encontradas sin vida, yo les pido que quien tenga a mi hijo me lo devuelva", pidió el padre del joven originario de Chiapas y desaparecido el 8 de mayo.
Las organizaciones civiles Comité de Derechos Humanos de Tabasco (Codehutab) y La 72, Casa del Migrante en Tenosique denunciaron la desaparición forzada ante la Procuraduría General de la Republica en San Cristóbal de las Casas, Chiapas.
Fray Tomás González Castillo, de La 72, dijo que los agentes del INM están coludidos con el crimen organizado y exigió a las autoridades del estado colaborar para esclarecer el caso.
Acusó, además, que la Policía Municipal de Cárdenas ha participado en cinco secuestros masivos de migrantes.
En una encuesta a 31 mil migrantes, 20 por ciento dijo que había sufrido diversos crímenes a manos de las autoridades, incluidos robos, extorsión, golpizas y detenciones ilegales, según el reporte "Presa fácil: violencia criminal y migración en Centroamérica", de la organización International Crisis Group.
"El súbito aumento en el número de migrantes irregulares que atraviesan el Triángulo Norte de Centroamérica hacia México es tanto una consecuencia de la violencia criminal como una oportunidad para los criminales de explotar a personas vulnerables en tránsito", concluye el estudio.