“Cada derecho es una responsabilidad,
cada oportunidad es una obligación,
y cada posesión un deber”
John D. Rockefeller
Para muchas personas, pasó desapercibido el agandalle hecho por el partido Morena y sus aliados, al haber aprobado en el mes de marzo en Cámara de Diputados Federal, reformas a la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales y a la Ley General de Partidos Políticos, relativas a reglamentar la reelección de diputados y senadores.
La aprobación se hizo en un momento en que los mexicanos se encontraban dimensionando la enfermedad covid- 19,con la ausencia en el pleno de los principales partidos políticos de oposición, sin que el dictamen hubiera sido discutido en comisión, y al que adicionalmente, se le dispensaron todos los trámites parlamentarios; pero que si contemplaba el hacer precampaña y campaña, sin tener que separarse del cargo.
Aunque la posibilidad legal de la reelección fue establecida en la Constitución Federal desde el 2014, la mayoría legislativa de Morena quiso imponer su visión en las reglas, sin escuchar y debatir con los demás partidos, pero además en forma repentina, tomando en cuenta que el plazo para legislar en materia electoral se vencía el último día de mayo.
Con ese antecedente, fue el coordinador de los senadores de Morena quien públicamente dijo que el Senado como cámara revisora no apoyaría ninguna decisión injustificada, precipitada, e inconveniente; agregando, que no se iba a aprobar esa propuesta de reforma; lo que efectivamente sucedió.
Así, con 6 años que han transcurrido desde que se incluyó en la Constitución la figura de la reelección legislativa, seguimos sin contar con una legislación secundaria en la materia; por lo que será el INE quien tendrá que fijar el marco normativo para los actuales legisladores federales que deseen reelegirse.
Al ser la primera ocasión, evidentemente las reglas que se generen estarán sujetas a críticas y respaldos. El presidente del INE ha señalado que es un derecho de los legisladores el de poder reelegirse, pero también dijo, que la reelección no es un pretexto para vulnerar la paridad, lo cual seguramente generará diversos conflictos jurídicos.
Las elecciones del 2021, en las que se estima tendrán la posibilidad de votar 96 millones de personas, serán de las más complicadas que haya habido en nuestro país, considerando el número de puestos de elección federales y locales que estarán en juego.
Por todo ello, será importante que el INE con sus nuevos integrantes, defina claramente lo que pudiera considerarse acto anticipado de precampaña y de campaña, por un legislador federal que tiene que seguir cumpliendo con su encargo, que haya una supervisión estricta sobre el uso de recursos públicos, y evitar que se use dinero de alguna partida para la obtención del voto.
Pero sobre todo, se debe buscar que el legislador que quiere reelegirse, cumpla con plena responsabilidad, y no use el cargo únicamente para obtener un sueldo y exposición mediática.
*ABOGADO Y MAESTRO EN DERECHO CONSTITUCIONAL Y AMPARO. MAGISTRADO DEL TRIBUNAL DE JUSTICIA ADMINISTRATIVA 2010-2017