En el planeta hay 1 millón 100 mil niñas y, como señala ONU Mujeres, son sin duda un poderoso grupo que dará forma a un mundo sostenible y mejor para todas las personas: "Millones de niñas talentosas y creativas, y sin embargo, sus sueños y potencial pueden verse frustrados por la discriminación, la violencia y la falta de oportunidades".
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que son la base de la planeación que la ONU (Organización de las Naciones Unidas) ha realizado para dirigir los esfuerzos planetarios hacia el 2030, tienen como premisa básica el empoderamiento de las niñas y las adolescentas.
Ésta es la lógica: Las niñas que nacieron al comienzo del Notivox son ahora adolescentas, mientras que las recién nacidas este año, lo serán en 2030. Empoderarlas desde ahora, va a cambiar de base las estructuras arcaicas de poder.
Por ello, durante los próximos años las conmemoraciones por el Día Internacional de las Niñas que tiene lugar cada 11 de octubre, no sólo estarán enfocadas a reconocer los derechos de las niñas y los problemas excepcionales que ellas confrontan en todo el mundo, sino a los compromisos tangibles de los gobiernos en esta materia.
La propia ONU señala que todos los días, las niñas hacen frente a la discriminación y la violencia en todo el mundo. En este año 2017, el Día Internacional de las Niñas centra la atención en el combate al matrimonio infantil y respaldar su progreso en todo el mundo.
El matrimonio infantil generalmente implica poner fin a la educación de una niña, su vocación y su derecho a elegir la vida que ella quiera. En todo el mundo, una de cada siete adolescentes de entre 15 y 19 años está casada o en pareja. Con frecuencia, el matrimonio infantil es la antesala de la procreación, aun cuando las niñas no estén física o mentalmente preparadas. Cada día, más de 20 mil niñas menores de 18 años dan a luz en los países en desarrollo: cifra que representa más de 7 millones de partos por año.
La reflexión sobre lo conseguido y sobre lo que se ha de lograr representa una oportunidad para considerar la importancia de la inversión social, económica y política en el poder de las adolescentas como un factor fundamental para romper la transmisión intergeneracional de la pobreza, la violencia, la exclusión y la discriminación. Si se les apoya efectivamente durante sus años de adolescencia, las mujeres tienen el poder de cambiar el mundo, tanto como las niñas empoderadas que son, como las trabajadoras, madres, empresarias, mentoras, cabezas de familia y líderes políticos que serán mañana.
Una inversión en el poder de las adolescentas mantiene sus derechos y promete un futuro más equitativo y próspero en el que la mitad de la humanidad participe de forma paritaria en la resolución de los problemas como el cambio climático, los conflictos políticos, el crecimiento económico, la prevención de enfermedades y la sostenibilidad mundial.
La visión para el 2030 es el empoderamiento de niñas y adolescentas. Por ello, para este Día Internacional de las Niñas se ha convocado a las agencias de la ONU, los Estados Miembros, las organizaciones civiles, el sector privado y diversas interlocuciones sociales para poner a las niñas en el centro de los esfuerzos del desarrollo sostenible, llevando a cabo iniciativas claves para el presente y el futuro tales como:
- Invertir en educación de calidad, formación, capacitación, acceso a la tecnología y otras iniciativas educativas que preparen a las niñas para la vida, el trabajo y el liderazgo.
- Invertir en salud y en una nutrición adecuada durante los años de adolescencia, incluyendo la educación sobre la pubertad, la higiene menstrual, la salud reproductiva y sexual y la disposición de esos servicios.
- Promover la no aceptación de la violencia física, mental o sexual bajo ningún concepto.
- Habilitar mecanismos sociales, económicos y políticos para combatir el matrimonio infantil y la mutilación genital.
- Invertir en la creación y mantenimiento de espacios púbicos para el debate cívico y político, la creatividad y la mejora del talento.
- Promover legislaciones y políticas de género en todas las áreas, especialmente para las adolescentas discapacitadas, vulnerables, marginadas y víctimas del tráfico y la trata.
Durante los últimos quince años, la comunidad mundial ha hecho importantes progresos en mejorar la vida de las niñas. Sin embargo, no se ha invertido lo suficiente en corregir los retos a los que hacen frente las niñas cuando entran en la segunda fase de sus vidas. Esto incluye obtener una educación secundaria y superior, evitar el matrimonio infantil, recibir información y servicios relacionados con la pubertad y la salud reproductiva, protegerlas contra los embarazos no deseados, las enfermedades de transmisión sexual y la violencia de género.
Para apoyar la campaña 2017 contra el matrimonio infantil en el Día Internacional de las Niñas, puede usarse el hashtag #DejemosQueLasNIñasSiguanSiendoNiñas.
@taniamezcor
FB: Tania Mezcor