Padecemos desde hace ya varios años una violencia que no para. Basta revisar los hechos del pasado fin de semana: 10 muertos en Ensenada luego de un ataque contra aficionados al automovilismo de campo traviesa; el ataque a miembros de la Guardia Nacional en Lagos de Moreno con un saldo de tres muertos; en Xalapa, el ataque a los comensales de un bar con tres muertos; y así es la historia de todos los días con un promedio de 88 muertos por día. No debería haber otra agenda más importante que la seguridad, pero el Ejército y la Marina las instituciones de atender la agenda de seguridad están enfocados a la construcción del Tren Maya, a la administración de las aduanas, puertos y del AIFA, detener migrantes, además de espiar a los de casa, como Alejandro Encinas. Atendiendo muchas agendas, pero muy poco la de seguridad.
En otro escenario, los maestros de la Sección 22 en Oaxaca vuelven a las andadas bloqueando aeropuertos y terminales de camiones en demanda de un 100 de aumento salarial. Los productores de maíz y trigo de Sinaloa y Sonora en paros y bloqueos en demanda de un aumento de los precios de garantía, mientras el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, atendiendo “conversatorios”, que son burdas campañas en diferentes ciudades del país.
La concentración de migrantes en las fronteras sur y norte de México son una bomba de tiempo. La relación con nuestro principal socio comercial sufre de altibajos ante los tiempos electorales de EU, pero Marcelo Ebrard, el canciller, publicitando su libro “El camino de México”, que son actos de campaña.
El Metro de la Ciudad de México “cayéndose a pedazos” y con graves deficiencias en el servicio, con decenas de problemas en los servicios, pero Claudia Sheinbaum en campaña acompañando al candidato de Morena en Coahuila. El gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, organizando y encabezando manifestaciones de odio contra los ministros de la Suprema Corte de Justicia.
Muchos de los personajes de la agenda nacional y estatales, dejando a un lado sus responsabilidades institucionales para atender campañas.
En qué momento cambiaron las prioridades del país.
