A Raquel, con mis condolencias
Es sorprendente cómo un gobierno municipal -como el de la ciudad capital- no solo dilapidó tan rápido el bono democrático y, al mismo tiempo y velocidad, unió a todos... en su contra.
Si el lema de la administración municipal de "Ciudad Incluyente", digamos que es un logro a medias, porque mientras cedió la vía pública al comercio informal, al narcomenudeo y la prostitución, ignoró a otros sectores de la sociedad, como lo es el sector privado.
La crisis por la pandemia puso a prueba a los tres niveles de gobierno, y el de Puebla capital, por lo hecho antes y después de la contingencia sanitaria, es una administración reprobada.
Las oficinas encargadas de evaluar los impactos en medios de comunicación contabilizan más las notas negativas que las positivas, ya que en últimas fechas no hay una sola a favor, ahora en plena pandemia.
De acuerdo con los reportes recientes de las autoridades sanitarias, Puebla capital concentra el 63% de los contagios y defunciones, es decir, es el epicentro de la enfermedad en el estado.
Y es que ésta administración no da una, a pesar de la aparente buena voluntad, pero hasta en eso lo hace mal, porque cuando pretendió "ayudar" en la atención de pacientes covi19, le rechazó el apoyo por adquirir respiradores mecánicos de segunda mano y en mal estado.
Cuando depende del ayuntamiento poblano la regulación del comercio informal para evitar la propagación de contagios, fue cuando más se permitió la expansión de los existentes, incluido el Centro Histórico, pues alentó la ocupación de más espacios públicos a lo largo y ancho de la ciudad.
Funcionarios que ejecutan las órdenes de la alcaldesa se han convertido en escuderos de todo tipo de ilegalidades, y es la actividad comercial lo que ha hecho crisis y una virtual ruptura con el sector privado agrupado en el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Los líderes de las cámaras empresariales firmaron un documento hecho público donde piden al secretario de Gobernación municipal, René Sánchez Galindo, se retracte en su dicho acerca de que los líderes empresariales son “doble cara”, y aclare a quiénes se refiere, toda vez que su discurso no abona al clima que priva en el municipio.
Si ese funcionario es el encargado de la política interna a favor de la gobernabilidad y estabilidad, pues para qué quiere enemigos el gobierno municipal de Morena.