Muchos se cuestionan el porqué, si aún quedan dos años para la elección presidencial del 2024, ya existen esfuerzos para dar a conocer a la y los posibles candidatos por el partido Morena. Para entender la dinámica que se está dando al interior del partido, primero hay que entender los estatutos y el ethos del partido.
El Movimiento de Regeneración Nacional inicia en 2011 como movimiento social, liderado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, con la firme intención de escuchar las voces de millones en nuestro país que habían sido ignorados por la clase política. No es hasta tres años después, en 2014, que Morena se constituye como partido político, al recibir el reconocimiento del INE.
En sus ocho años de existencia, no solamente logró obtener la confianza de 30 millones de mexicanas y mexicanos (53% de los votos) en la contienda presidencial de 2018, el más alto en la historia de nuestro país, sino que logró afianzarse como la mayor fuerza política de México con la mayoría de las gubernaturas y congresos estatales.
A diferencia de los demás partidos políticos vigentes, en Morena las candidaturas a todo puesto de elección popular se establecen por medio de encuestas. Es decir, el pueblo decide. En los demás partidos la decisión recae en las cúpulas.
La declaración de principios y los estatutos de Morena establecen medidas inéditas en la política mexicana para garantizar que grupos o tribus no puedan monopolizar las decisiones al interior del partido. Ejemplo de ello es la selección de candidatos, así como la elección de consejeros.
A pesar de que este sistema no ha operado sin errores y abusos, el simple hecho de establecer la obligación de que todo candidato sea decidido por encuesta general es un paso contundente, avanzando hacia una democracia realmente operativa y no meramente de palabras.
Los esfuerzos por dar a conocer los perfiles y proyectos de los aspirantes ya inició en cada uno de los estados de nuestro país, pero es la misma militancia de Morena en cada rincón de México la que está activa impulsando el perfil que les convenza. Es el derecho de todos los que militamos en Morena opinar, o no, respecto a quién nos convence para que continúe liderando los trabajos de transformación de México después del año 2024.
En lo personal, como ciudadano y militante, considero que es tiempo de que la máxima posición política de nuestro México la ocupe una mujer ética y preparada.
Mauricio Cantú González@CantuMauricio