Nadie está proponiendo desaparecer al INE, el organismo electoral mantendrá las mismas facultades constitucionales y autonomía. Éste continuará organizando las elecciones y declarando a los candidatos electos, también mantiene el control del padrón electoral y la emisión de credenciales de elector.
Lo que se busca es reformar un sistema corrupto e ineficiente para que realmente garantice la democracia en nuestro país y se eviten los Pemexgate, los amigos de Fox, Monex y muchos más fraudes electorales sin castigo.
A través de la historia, líderes políticos, religiosos, sociales y hasta culturales se han aprovechado de la apatía o hasta pereza de muchos para desinformar y manipular. Lo que está sucediendo en torno a la propuesta de reforma electoral refleja exactamente esto.
La iniciativa de reforma que presentó el Presidente de México ante la Cámara de Diputados, en abril pasado, consta de 56 páginas, el Decreto solamente 34. Para leerlo completamente es tan sencillo como dedicarle un par de horas sin distracciones.
Sin embargo, una parte considerable de la población cree y repite mentiras de políticos y periodistas que ni siquiera han leído el documento.
¿El Presidente quiere imponer a sus cuates en las consejerías y magistraturas? Justo lo contrario, el sistema actual es el que permite esta práctica. Lo que se busca es democratizar el proceso de selección que existe actualmente. El Presidente podría impulsar con la mayoría de Morena a 4 consejeros que terminan su encargo el año que viene (incluyendo Lorenzo Córdova).
Lo que se propone es incluir a la Suprema Corte, ambas cámaras del Congreso y el Poder Ejecutivo en enviar una lista (terna) de candidatos idóneos, y que de entre estas listas la selección de los consejeros y magistrados la haga la ciudadanía en elecciones organizadas por el propio organismo electoral. Adiós selección de perfiles por dedazo y acuerdos a puerta cerrada entre políticos.
En el tema del financiamiento se propone reducir el número de consejeros de 11 a 7 y eliminar el financiamiento a partidos políticos en época ordinaria no electoral. Somos de los países que más recursos erogan y menos cuentas se rinden.
Se propone reducir los senadores, diputados federales y locales, así como regidores.
Se busca poner orden donde no lo hay, pero los invito a no creerme y leer la misma iniciativa de reforma electoral. Nada es mejor que consultar los documentos primarios de propia cuenta.
Mauricio Cantú González
@CantuMauricio