Los enfrentamientos de policías con delincuentes, suelen ser cosa frecuente, más de lo que se esperaría, pero los elementos de las corporaciones policiacas están mental y físicamente preparados para tales reyertas.
Cuando se trata de delincuencia común, el factor físico y táctico es determinante para lograr la detención, sea que medie o no persecución. Ahí es la hora de la verdad, cuando lo teórico y práctico aprendido en el Instituto de Formación entra en juego para coronar operativos con eficacia y saldo blanco.
De vez en cuando suceden batallas donde uniformados caen en el cumplimiento de su deber. Estas últimas, que también se están sucediendo con mayor frecuencia de lo que se desearía, generan siempre indignación entre la población, y sobre todo un sentimiento de solidaridad e impotencia entre la tropa.
Eso precisamente está ocurriendo en momentos como este, cuando se acumulan las bajas tanto en las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado (FSPE) como en las corporaciones policiacas municipales.
Al respecto, la gobernadora Libia Dennise ha reconocido que la lucha contra la delincuencia, sobre todo la organizada, “es una guerra que enfrentamos en desigual (...) fueron atacados con armas largas, automáticas cuando nosotros (las FSPE) no tenemos permiso para portar esas armas”, y adelantó que elevará ante las autoridades federales la urgencia de realizar cambios en el marco legal para permitir a sus elementos patrullar con mejor equipamiento.
Llaman la atención otros aspectos que deben ser considerados igualmente. En efecto, la batalla es desigual, en principio, porque las fuerzas policiales deben acatar la Ley y se enfrentan a grupos delictivos que se dedican precisamente a lo contrario, a quebrarla.
Un factor a favor de la policía estatal está precisamente en lo que es parte del nombre de la nueva estrategia operativa: la inteligencia anticrimen. Que cada patrulla que realice funciones en campo sepa qué territorio está pisando y cuáles son los objetivos criminales y los riesgos que se puede enfrentar. Es tiempo de socializarlo y capitalizarlo en su favor.
