Ya se habla de una posible legalización de autos “chuecos”, lo cual de darse sería un duro golpe para los dueños de agencias de autos nuevos, seminuevos y para todos aquellos que se dedican a vender vehículos mexicanos.
Se ha dicho que en el país circulan alrededor de 18 millones de autos y camionetas “chocolates”, por lo que se puede decir que al legalizarlos, los gobiernos estatales tendrían un buen ingreso en sus arcas, pero el costo que se pagaría sería bastante alto.
Fue el partido de Morena el que presentara la iniciativa de ley para regularizar los carros “chuecos” y como es el partido que manda en el Congreso de la Unión, se espera que en un plazo de ocho meses se pueda iniciar la legalización.
Miguel Riquelme, gobernador de Coahuila, está en contra de esta medida, ya que dañará la producción nacional de vehículos y tendrá un impacto directo en el estado.
Además el mandatario coahuilense dijo no estar de acuerdo con una eventual regularización, ya que Coahuila es un estado productor de vehículos, por lo estará al pendiente de la decisión final que tome el gobierno federal.
Por su parte las organizaciones terminadas en “pafa” ya se frotan las manos, saben que es el negocio de su vida, es el momento que estaban esperando y con una legalización, entrarán muchos pesos a sus bolsillos.
Los dueños de autos “chuecos” sienten que ahora sí podrán tener sus carros en regla, van a poder viajar a todo lo largo y ancho del territorio nacional, además, ya no volverán a tener miedo a salir a las calles con el temor de que se los decomisen.
Por su parte el sector empresarial, siente que con la legalización se afectará la industria automotriz, así como la economía en general, ya que se pondrían en riesgo los miles de empleos directos e indirectos que dependen de este sector.
Los mismos empresarios confían en que el mismo gobierno federal frene esta iniciativa, ya que el poner en regla estos vehículos, no evitará que con el paso de los años sigan ingresando más y más al territorio nacional.
Esta medida perjudicará a muchos, pero también habrá de beneficiar al sector más vulnerable.