Se pasó el Buen Fin, también el puente del 20 de noviembre, los festejos por la Revolución Mexicana y ahora lo que sigue.
En estos días ya se pueden ver muchas caras felices, saben que viene lo que es calificada como la mejor época del año, las fiestas decembrinas.
Acaban de iniciar las peregrinaciones a la Virgen de Guadalupe, pero es en estos últimos días de noviembre, cuando también inician los pagos de los aguinaldos, por lo que muchos laguneros ya esperan su dinero para pagar deudas, así como para comprar los regalos de navidad, los juguetes que habrá de traer Santa Clos y hasta lo que se consumirá en las cenas de Noche Buena y Año Nuevo, incluidas las bebidas espirituosas.
Ya en algunos lugares y aprovechando que los contagios por covid-19 siguen bajos, se han empezado a realizar con mucha anticipación las preposadas, ya que muchos habitantes de la región están ávidos de fiestas, de disfrutar de la música y además, de aventarse unos buenos pasos de baile.
Llega el mes de diciembre y todo es felicidad, por lo que en los trabajos muchos ya están llevando a cabo los intercambios para ver a quién le tocará regalar.
En los hogares, muchos pequeños ya empezaron a hacer sus cartitas al hombre que vive en el polo norte, le escriben a Santa Clos la larga lista de juguetes que quieren que les traigan la madrugada del 25.
Otros que ya se preparan son aquellos que venden comida para llevar, ya que sus ventas son muy buscadas por aquellos que prefieren pedir en lugar de preparar, principalmente para las fiestas de fin de año.
Los centros comerciales, saben que deberán seguir con sus ofertas, ya que la inflación ha empezado a pegar fuerte en los bolsillos de los laguneros, quienes habrán de buscar los sitios en donde puedan encontrar lo que buscan para las fiestas que se aproximan, empezando por la comida y terminando por el alcohol.
Las autoridades también ya se preparan, principalmente para vigilar las instituciones bancarias, los cajeros automáticos y evitar que quienes cobren sus aguinaldos, sean víctimas de los delincuentes.
En fin, se viene un cierre de año tranquilo, ya sin el cubre bocas y ahora si se podrán disfrutar las fiestas como en los viejos tiempos.
