Múltiples acusaciones.
En un diario aparecieron 16 personalidades involucradas en el caso Odebrecht y con la reforma energética del sexenio pasado. Cada uno de ellos tiene su foto y mucha gente va a pensar que son ciertas todas las acusaciones, porque estos mexicanos, encabezados por Peña Nieto y otros ex presidentes, sin juicio previo, ya fueron juzgados por ese medio, en un país que hay inocentes en la cárcel y culpables libres, como Lozoya.
Todo esto augura la incredulidad en los medios y a la vez se está creando una cultura de que todos son culpables, o como decía el maestro Hermenegildo Torres: no va a haber nadie que cierre la puerta, porque todos están adentro.
Qué pena que la comunicación se haya convertido en parte interesada de los procesos políticos y simplemente lanza acusaciones al aire. Mientras eso sucede, muchas buenas conciencias quedan en entredicho y repercute en su vida familiar, porque no hay regreso completo.
Descartes: Pienso, luego existo… “Ay de aqueln que escandalice. Más le valdría que le ataran al cuello una piedra de molino y lo arrojaran al mar” (La Biblia).
Luis Eugenio Todd
