Nació social y se hizo mercantil.
A mí me tocó colaborar con el gobernador Jorge Treviño quien, cuando se cerró la Fundidora, creó el parque, el que dedicó a ser el respirador de Monterrey. También acordó crear un Centro de Convenciones que Monterrey requería. Con el tiempo, el Parque fue formando parte del esfuerzo de una cultura ecológica, pero gradualmente se consolidó como un lugar ideal para grandes auditorios y así se favorecieron negocios y se perdió su tesis original.
Al margen de que Conarte, que es un proyecto cultural, durante el gobierno de González Parás instaló museos y recuperó el Horno 3, actualmente estas inversiones no pueden hacer sobrevivir al Parque por falta de recursos económicos.
Yo creo que la tesis original para crear los museos, fue que éstos los mantuviera la iniciativa privada, como lo fueron muchos de ellos, y que los agregados comerciales sirvieran para ese objetivo. Pero en la actualidad el Parque Fundidora está en quiebra y tenemos que recuperarlo en la concepción original, que era verde y cultura.
Descartes: Pienso, luego existo… El oxígeno es indispensable para una ciudad contaminada y la cultura también. Necesitamos apoyarlo.