El camino de Santos Laguna pera terminar como líder general del torneo luce allanado en las últimas dos jornadas al enfrentar a equipos de la parte media baja de la tabla del torneo Apertura 2019, Cruz Azul y Toluca.
El panorama es ideal para sumar los últimos seis puntos del campeonato y cerrar con 39 unidades, pero en el fútbol, como en la vida nada es seguro.
Podría surgir tres factores que pudieran impedir la cosecha de puntos esperada para la escuadra santista en el cierre de torneo.
El primero, los imponderables que se presentan en un partido de fútbol y que siempre deben ser considerados (lesiones, expulsiones, decisiones arbitrales).
El segundo es que Cruz Azul o Toluca jueguen sus mejores partidos del campeonato y superen a los albiverdes, y el tercero es que se atraviesa la fecha FIFA de noviembre antes de la última jornada, aunado a lo anterior, la escuadra lagunera podría haber asegurado el liderato general este fin de semana por lo que se podría, y remarco podría, decidir no desgastar jugadores en la altura de la ciudad de Toluca al mediodía.
Para Santos Laguna comenzará desde el próximo domingo la condición de amplio favorito para, primero, ganar partidos, y segundo, imponerse en cada ronda eliminatoria de la liguilla del fútbol mexicano.
Es el precio que se deberá pagar por el primer lugar general.
A partir del enfrentar a los Cementeros, los santistas son el equipo favorito en las apuestas y en las quinielas.
La suma de sus puntos respalda el calificativo de principal favorito para levantar el trofeo de campeón, tal como ocurrió con León en el torneo pasado pero que tuvieron como obstáculo Tigres para coronarlo con el título.
Santos Laguna deja de ser la sorpresa del torneo, junto a Necaxa y Querétaro, y desde el cotejo del próximo domingo es muy, muy favorito para ganar.
A veces, y solo a veces, esa responsabilidad tiene mayor resonancia cuando finalmente llegan a la prensa de la Ciudad de México, que suele ser poco atenta cuando el líder no es América, Cruz Azul, Chivas o Tigres.
No es lo mismo ser el equipo sorpresa del campeonato a tener los reflectores enfrente de favorito.
