Come tú mismo la fruta. Se quejaba un discípulo con su maestro: “Siempre nos cuentas historias pero nunca nos revelas su significado”. El maestro le replicó: “¿Te gustaría que alguien te ofreciera fruta y la masticara antes de dártela?”
Nadie en tu lugar puede descubrir tu propio significado.
-Respetar las opiniones
Un hombre que ponía flores en la tumba de un pariente, vio a un japonés colocando un plato de arroz en la tumba vecina.
El hombre se dirigió al japonés y le preguntó: “Perdón, señor, ¿pero en verdad cree que el difunto se comerá el arroz?” “Sí”, contestó el japonés, “cuando el suyo venga a oler sus flores”.
Respetar las opiniones ajenas es una de las mayores virtudes. Todos pensamos y actuamos diferente. Antes que juzgar, comprenda.
-Los niños
Una tarde nublada y fría, dos niños patinaban sin preocupación sobre una laguna congelada. De pronto el hielo se rompió y uno de ellos cayó al agua.
El otro niño cogió una piedra y comenzó a golpear el hielo con todas sus fuerzas, hasta que logró quebrarlo y salvar a su amigo.
Cuando llegaron los bomberos y supieron lo que sucedió, se preguntaron: “¿Cómo lo hizo? El hielo está muy grueso, es imposible que haya podido quebrarlo con esa piedra y sus manos tan pequeñas”.
En ese instante apareció un viejo, que con una sonrisa, dijo: “Yo sé cómo lo hizo”. “¿Cómo?”, le preguntaron.
“No había nadie a su alrededor para decirle que no podía hacerlo. Si lo puedes imaginar... lo puedes lograr”.
-Apuntar alto
Un maestro quiso darles una lección especial a sus alumnos, para ello les dio la oportunidad de escoger entre tres exámenes: Uno de 50 preguntas, otro de 40 y el otro de 30. Sin importar lo que hubieran contestado, a todos los que escogieron el de 30 les puso una “C”, a los que eligieron el
de 40 les puso una “B”, y a los que prefirieron el de 50 les puso una “A”.
Ante la inconformidad de los alumnos, el maestro les explicó: “He de decirles que no pretendí examinar sus conocimientos, sino su voluntad de apuntar a lo alto. Quiero que entiendan que cuando apuntamos a lo alto estamos más cerca de alcanzar nuestros sueños que si nos conformamos con pequeños objetivos”. Autores anónimos.
Amigo lector, y usted, ¿qué opina?