En el averno, Claudio el demonio conspiraba
pues gobernar México desde el infierno ansiaba.
Las corporaciones malignas,
le pasaron sus consignas,
le otorgaron su confianza,
para realizar toda transa,
dinero a manos llenas,
incluidas sus tres hienas,
PRI, PAN y PRD, puso a su disposición,
para, en contra del pueblo, cometer una traición.
De la misma manera, y con maligna intención,
se sometieron a su control, los medios de desinformación.
Ciro, Dresser y Sarmiento,
ya habían sufrido escarmiento,
y ni con todas sus fregaderas,
pudieron con las mañaneras.
El diablo en cuestión ya en la tierra,
resolvió su primer dilema,
Para crecer cual burbuja,
se trajo a su mejor bruja,
del infierno la más famosa,
conocida por tramposa.
Emergiendo de la lumbre,
quien, con tan mala costumbre,
se robaba el presupuesto,
aprovechando su puesto.
La bruja Xochicleta,
que la neta odia la bicicleta,
su físico le da harta lata,
y al mismo tiempo la delata.
No es que a nadie le importe,
pero jamás ha hecho deporte.
No es que a nadie dé ira,
pero molesta la mentira.
En el terreno electoral hizo una gran irrupción,
destacando, sobre todo, su increíble corrupción.
Mil cuatrocientos millones, le descubrió el presidente,
cuando ella intentaba engañar a la gente.
Alegó que esos millones eran de sus sobrinas,
y que los ganó hábilmente vendiendo sus gelatinas,
De pronto las nubes se abrieron
y rayos de luz se esparcieron
pues los ángeles del cielo
custodiaban con gran celo
al presidente Obrador,
consentido del Creador.
Así AMLO, de la mano de Dios,
logró al PRIAN decir ADIOS.
Consiguiendo el presidente,
Aliado con toda la gente,
a los partidos en suerte,
condenarlos a muerte
descendiendo hasta el infierno
para su castigo eterno.