Históricamente, las obligaciones alimenticias en México han sido una prioridad de carácter progresivo e incluyente hacia los niños, niñas y adolescentes ante el problema social de padres y madres que no cumplen con sus obligaciones alimentarias.
A pesar de esto, algunos padres no cumplen con sus obligaciones, muchas veces escuchamos que el moroso prefiere el desempleo o manifestar ingresos inestables antes de subsanar los gastos que devienen de una pensión alimentaria.
Este lunes se publicó en el Diario Oficial de la Federación la creación del Registro Nacional de Obligaciones Alimentarias que recopilará información sobre deudores y acreedores de obligaciones de pensión alimenticia para proteger los derechos de los niños y adolescentes. El Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) supervisará el Registro y obtendrá información actualizada de los Tribunales Supremos de Justicia de los estados y de la Ciudad de México.
Aunque algunos argumentan que el Registro violenta derechos fundamentales como la privacidad y el derecho al trabajo, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ha confirmado la constitucionalidad.
Con fecha de 8 de mayo se publicó un instrumento que a los morosos dejará sin licencia, credencial para votar, pasaporte, hasta que regularicen los adeudos con su prole.
Ayer en Notivox Televisión la senadora y presidenta de la Comisión de los Derechos de la Niñez y la Adolescencia, Josefina Vázquez Mota, me decía que el espíritu del Registro no privilegia la sanción, pero que había que ponerle dientes: “se prevén medidas de restricción migratoria para que no puedan salir del país, y por primera vez los morosos perderán esos derechos que nunca han perdido”.
El 2024 está a la vuelta, a finales de este año comienzan las pre-pre-pre campañas y sin un documento que avale a las y los candidatos, quizá más de uno quede fuera.
Habrá quienes puedan ver el Registro como excesivo, los tribunales han adoptado un enfoque más medido, reconociendo que los derechos de los niños y adolescentes a recibir apoyo financiero de sus padres son primordiales.
La temida lista en el Registro Nacional de Obligaciones Alimentarias tendrá un año para armonizarse en el país, un año para que todos aquellos se pongan al corriente.