Del 7 al 11 de febrero, es decir, del siguiente domingo al viernes de la otra semana, el Consejo General del INE designará a un presidente o presidenta provisional para el Instituto Estatal Electoral.
Tras la remoción de Guillermina Vázquez como presidenta del organismo y del consejero Francisco Martínez Ballesteros, la situación luce complicada y tensa. Y es que casi 7 años al frente del IEEH, hicieron de la acaecida funcionaria electoral la mandamás en todos los sentidos al interior, designando, colocando y diseñando los planes de trabajo para que todo funcionara al cobijo de sus órdenes.
Sin embargo, el error del PREP para la elección de municipios en 2020 fue algo que no pasó de largo en el Consejo General del INE y los resultados ya por todo son conocidos.
El caso aquí es que a excepción de Ariadna González Morales y de Alfredo Alcalá Montaño, el resto de consejeros, directores de áreas y funcionarios de la mayoría de oficinas, son y forman parte del equipo de Guillermina Vázquez Benítez, incluidos los tres consejeros restantes, el secretario ejecutivo y demás participantes de lo que fue la última elección de ayuntamientos.
El plazo fatal para el IEEH y su ex consejera presidenta es este viernes debido a que debe presentar el recurso de queja ante la Sala Superior del Tribunal Electoral federal para que se resuelva si lo acordado por el INE es correcto o se puede revertir.
Todo indica que no será así, y el problema aquí recae en que se queda ante los ojos de la sociedad un instituto que no cumple con el principio de certeza para los resultados de la elección a gobernador que está por efectuarse.
Veremos cómo es que todo este galimatías termina influyendo en los partidos y sus aspirantes, en la participación de la ciudadanía y en la organización para el 5 de junio.
Eduardo González
Twitter: @laloflu