La siguiente Legislatura local en Hidalgo será sin duda la parte más importante para el cierre de administración del gobierno de Omar Fayad Meneses; prueba de ello es que se han aceptado todos los términos de la política de alianzas nacional del PRI para ir con PAN, PRD y Encuentro Social para buscar ser mayoría a partir de septiembre próximo.
La agenda comparte los mismos propósitos nacionales para San Lázaro, pero en Hidalgo tiene muchas particularidades; pese a que Morena es mayoría hoy en el Congreso en Pachuca, no ha sabido llevar su posición y tampoco ha sido un músculo aplastante como en otras partes del país.
Uno de los propósitos de la política es la organización y para ellos el PRI comenzó con dicha estrategia para encabezar una mayoría de resultarles el plan en las urnas el 6 de junio.
¿Cómo se llevaría a cabo?, ganando de los 18 distritos los 9 que les tocan en alianza, más sus tres plurinominales de cajón, sumado a los triunfos que pueda conseguir el PAN y PRD, para ser 15 más uno en el Congreso que es de 30 curules. Para ello ya comenzaron los registros de sus aspirantes a las candidaturas para el Congreso local y vemos como queda conformado dicho plan con los actuales dirigentes tricolores, Erika Rodríguez y Julio Valera, quienes así como coordinaron las elecciones municipales de 2020, harán lo propio para este año. A ellos se suma Alejandro Enciso, quien es uno de los activos más importantes con los que cuenta actualmente el tricolor y el propio gobierno estatal, pues desde su posición ha sabido conciliar temas de algidez para el estado.
De no ser importante la siguiente Legislatura, no estarían echando toda la carne al asador, más que en las municipales, por lo que los demás partidos parecen no estar entendiendo el ajedrez que se les presenta y siguen entrampados en conflictos internos.
twitter: @laloflu
