Que fiel a su costumbre Jorge Zermeño Infante sigue imaginando escenarios sospechosos cuando los reporteros le preguntan sobre los casos de covid-19 que se han generado entre sus empleados. Primero en Vialidad, luego en la presidencia municipal y ahora entre los bomberos.
Y llama la atención porque en un principio el edil desestimó establecer medidas estrictas para evitar los brotes, se negaba a usar tapabocas y convocaba a actividades masivas. Si un líder como él desestima la gravedad de la situación es evidente que forma opinión. Y muchos de sus seguidores se negarán a acatar las disposiciones que en tiempos extraordinarios se establecen para evitar que el coronavirus covid-19 se expanda. No debería pues sentirse agraviado si los chicos de la prensa le preguntan si su gente está debidamente protegida ante los contagios que les alcanzaron, porque con su actitud pone en tela de duda que realmente esté atendiendo la contingencia, entre sus propios empleados. Increíble.
Que mientras en el resto del estado de Coahuila los presidentes municipales y ciudadanos se toman en serio lo de la pandemia, en Matamoros, el surrealismo es costumbrismo. Es tan surreal que se estén aventando peinetas y escupitajos en los ojos por la grilla, por una contienda electoral que está lejana y a nadie, al menos a ciudadanos de a pie le importa. Un día sacan la nómina de “favorecidos” de la gestión, otro día denostan a los reporteros que la publicaron, otro día lanzan acusaciones cargadas de mala leche y se meten hasta con la familia, otro día acusan a empleadas de tener relaciones con sus superiores para alcanzar favores o cargos. Cuando revisas esas redes o la “información” que alegremente se comparte en whats app sin fuente y sin confirmación uno se pregunta en qué mundo vive o si la película “La Ley de Herodes” fue sacada de las entrañas mismas de Matamoros y sus polakos.
Que muy controladitos están los funcionarios de la administración gomezpalatina. Si se busca información sobre las condiciones en que opera el Asilo de Ancianos, dependiente del Sistema DIF, de Gómez Palacio, dirigido por Laura Vitela, ante la pandemia que en otras regiones del mundo ha impactado a los asilos con dureza es muy simple la respuesta: no se puede proporcionar información a menos que lo autorice Teresa González. Se entiende que quieran ser cuidadosos, pero no hay que exagerar. Al final, respondieron. No hay mala intención, sólo preocupación.
