Que al menos una decena de trabajadores de la Auditoría Superior del Estado se encuentran, lupa en mano, revisando una por una las cuentas del Simas Torreón desde hace más de una semana. Dicen que varias áreas del organismo están ocupadas con columnas y columnas de documentos que les solicitaron. A ver si esta vez la auditoría arroja resultados, no como en el caso del Simas Rural, del que nunca se supo nada tras la revisión.
Que existe un cárcamo en la Zona Industrial de Torreón construido desde hace al menos tres administraciones, pero que no operaba por un “pequeño detalle”: fue entregado a los empresarios para su funcionamiento total, pero a estos se les olvidó –o les dolió el codo– hacer el contrato de luz. ¿Pensaban que funcionaba con baterías o cómo? El caso es que apenas se dieron cuenta de la situación y pidieron “el favor” a la CFE de conectarlos... sí, colgados. ¡De veras!
Que el Senado de la República fue sede del foro “Desafíos del Noreste ante el Cambio Climático”, donde se dieron cita autoridades de los tres niveles de gobierno, legisladores y representantes de la Oficina de Naciones Unidas para el Cambio Climático, así como de la Universidad de las Naciones Unidas. En su intervención, el senador Luis Fernando Salazar subrayó que Coahuila es un estado con fuerte vocación industrial, minera y energética, cuya economía por décadas ha girado en torno a la producción de carbón, acero, energía eléctrica y manufactura.
Que nuevos aires soplan en el Heroico Cuerpo de Bomberos de Torreón, con la llegada de Francisco Javier Martínez Basurto como nuevo titular de la corporación. Dicen que llega con la intención de poner orden y mejorar el ambiente interno, además de asegurarse de que se cumpla con el aumento prometido a los elementos: el que les dieron, les quitaron... y finalmente, se los volvieron a dar. Aseguran que quedaron atrás las viejas prácticas que generaban tensión dentro de esta noble institución.
Y que nadie en el gobierno salió a defender al lagunero Ricardo Mejía Berdeja tras la denuncia del PAN Coahuila por sus presuntos vínculos con la delincuencia organizada. Ni su exjefe, el gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, dijo esta boca es mía. En el entorno de Sheinbaum, todos guardaron silencio absoluto.
