Que en Ciudad Victoria perfilan que la mano de César Verástegui Ostos se meta en los nuevos comités, municipal y estatal, del PAN, que pasarán por su proceso de renovación. Si bien la continuidad de Kiko Elizondo está cantada, las decisiones que tenga el secretario General de Gobierno se perfilan para las ciudades, pues el trascendido es tener un mayor control de cara a la muy importante elección del 2021.
Que hablando de los azules y sus nuevos titulares de comités, en Ciudad Madero Esther Lozano está negociando prolongar su mandato, aunque tendrá competencia pues alistan a Jesús Castro Monroy, actual secretario de Organización (y gente de Agustín de la Huerta) para ir por la presidencia. Falta que los Morado quieran entrarle a la contienda, porque de hacerlo, deberán jugársela otra vez con Francisco Castañeda.
Que Ulises Ruiz estuvo en Tamaulipas y se le fue a la yugular a Yahleel Abdala. “En Tamaulipas, la presidenta del PRI no representa nada”, dijo sin pelos en la lengua, al comentar que la dirigente no tiene empacho en andar de porrista de Alito; pero la clase política del partido está urgiendo el cambio y promete liderazgos avalados por los militantes.
Que los morenos tamaulipecos en posiciones estratégicas y con aspiraciones políticas tienen otra oportunidad de quedar bien con quien los llevó a ocupar el cargo. Y es que como no se concretó la reunión con Andrés Manuel López Obrador, la amenaza de volver a cerrar carreteras está latente. No es posible que manden a un diputado de Chihuahua a escuchar a los productores tamaulipecos, pero habla también de que no le tienen confianza a los operadores de casa. ¿Por qué será?
Que a propósito de los de Morena, por fin se activaron, pero mal, quienes se atenían a que don Pepe Toño Leal Doria les hiciera la chamba y llevara las impugnaciones a las instancias electorales. El -en teoría- presidente estatal del partido, Enrique Torres Mendoza, está apelando la negativa del Ietam para cambiar la suplencia plurinominal del hoy difunto.
