Que se le carga la chamba a la Legislatura mexiquense, y por esa razón la Diputación Permanente del Congreso del Estado de México debió convocar al segundo periodo extraordinario de sesiones para pasado mañana. Es una situación que se preveía, pues abundan los temas de importancia a tratar: serán 16 dictámenes, como la convocatoria para la renovación de la titularidad en la Comisión de Derechos Humanos, la extinción del Instituto de Transparencia y mayor penalidad para el delito de despojo, entre otros. El deber llama.
Que en algunas dependencias del gobierno mexiquense crece la molestia de las y los trabajadores debido a que mandos medios les están aplicando la "ley del like", pues son presionados para que, cada que su titular publica algo en redes sociales, en menos de 10 minutos todos reaccionen con el correspondiente "me gusta", comenten -con entusiastas porras, claro- y compartan la publicación, so pena de una fuerte llamada de atención... O quizá más.
El tema no iría más allá de reflejar un ánimo desbordado de algunos personajes para apapachar a sus jefes, pero la situación pasa por el tiempo que las y los servidores públicos a su cargo en diversas áreas deben destinar a inflarles la simpatía en las diversas plataformas en lugar de dedicarse a sus labores… y peor todavía, que esa obligación ya se extendió hasta a sus días inhábiles. ¿Quiénes serán los digitales ocurrentes? Cosas veredes.
Que en estos tiempos de los ecosistemas bajo amenaza, es importante destacar que en las últimas dos décadas ha ido avanzando significativamente el Programa de Auditoría Ambiental, que promueve la ahora Secretaría de Medio Ambiente del Estado de México. Ni más ni menos se ha incrementado exponencialmente el número de empresas certificadas, pasando de 5 a 220 durante este periodo. El año 2024 fue récord en la entrega de certificaciones a empresas participantes. Un respiro entre la difícil situación.