Que los datos del Censo Nacional de Poderes Legislativos Estatales 2023 que llevó a cabo el Inegi fueron reveladores para el análisis político, sobre todo porque los dos primeros años de esta Legislatura había un gobierno priista en el Ejecutivo y una mayoría morenista en el Congreso, pero sólo llevaron a cabo nueve comparecencias de funcionarios, lejos del comparativo con otras entidades.
Que hablando de la Cámara, resultó loable el reconocimiento que hizo a las y los abogados de este poder con entre cinco y hasta 30 años de servicio, por ser el insumo principal para legislar. Hay quienes, como el diputado Gerardo Ulloa, opinan que esto debe pasar de un diploma a una medalla y compensación económica, así como reglas para que cada año se premie a los especialistas de la ley. Algo que sepa y se sienta, dirían algunos.
Que bien por la Secretaría de Finanzas que elevó el nivel de seguridad de las placas vehiculares, la tarjeta de circulación y la calcomanía, con 14 “candados”. Esto evitará que la gente sea timada y compre unidades con papeles falsos, sobre todo en plena era de la tecnología, donde todo es clonado con o sin inteligencia artificial. El gobierno siempre debe estar un paso delante de la delincuencia.
Que en otros temas positivos, un efecto evidente del buen manejo del Desarrollo Económico estatal, a cargo de la Secretaria Laura González, es que de septiembre a junio el Estado de México alcanzó 71 mil 242 nuevos puestos de trabajo formales, según el último informe del IMSS publicado hace pocos días. Nada más y nada menos estos resultados colocan a la entidad en el primer lugar nacional en la generación de empleos y representa 22 por ciento del total del país, un récord en los últimos 27 años.
Que a pesar de la crisis hídrica y otros efectos del cambio climático, hay muchas autoridades y cientos de miles de ciudadanos a quienes no les cae el veinte de la importancia de invertir más (recursos y tiempo, respectivamente) en el cuidado del medio ambiente, desde la casa y las instancias públicas, ahorrando agua, aprovechando la lluvia y generando más espacios verdes y desechando menos. El futuro ya nos alcanzó.