Que mal y de malas empieza la bancada del albiazul para la próxima legislatura pues todo parece indicar que habrá un interescuadras para el nombramiento de quien será el coordinador de la fracción parlamentaria del PAN y el primero en moverse fue el diputado federal electo, Jorge Espadas, quien desde hace tiempo hablaba de tal posibilidad dada la cercanía con la PPE (primera panista del estado) Libia García.
En redes sociales quien levantó la mano fue Juan Carlos Romero Hicks, con un discurso en el que hace un llamado al nombramiento de perfiles con ética, prudencia, legalidad y sentido estratégico, cualidades que ha cosechado quien ha pasado por la rectoría de la Universidad de Guanajuato, la gubernatura, el Congreso de la Unión y el gobierno federal.
Que desafortunadamente eso no es garantía de que vaya a ser nombrado como pastor del rebaño panista, función que por cierto será clave en las negociaciones que lleve a cabo el partido frente a una oposición que se antoja será difícil de convencer sobre todo en asuntos relacionados con nombramientos pendientes y no se diga presupuestales.
Ayer se dio un encuentro acalorado entre los dos aspirantes a agarrar las riendas de los diputados del PAN, mientras que quien dirige el partido, Aldo Márquez, y será el encargado de designar al sucesor de Luis Ernesto Ayala aseguró que para nada hay confrontación y los dos tienen el perfil para ser el coordinador.
Que hablando de la gobernadora electa, Libia Dennise García, mantiene su agenda de trabajo cercana con el gobierno de los Estados Unidos y esta semana se reunió con el embajador del país del norte en México, Ken Salazar quien cobró relevancia en días recientes tras emitir su opinión respecto a la reforma al Poder Judicial.
Hay “disposición de hacer equipo y sobre todo hay una sólida amistad que traerá cosas buenas para nuestro estado”, aseguró la gobernadora electa quien también se reunió con más funcionarios de la sede diplomática acompañada por sus más cercanos colaboradores. _