Que la sucesión se puso en marcha y ayer el gobernador Diego Sinhue dio el banderazo de salida a quien todo apunta será la candidata del PAN que buscará sentarse en la silla en la que hoy despacha Rodríguez Vallejo en el palacio de Paseo de la Presa, contienda que inicia el año que entra y cuyas definiciones se han dado paulatinamente.
Y recordemos que los astros se alinearon el día en que Marko Cortés y el mandatario estatal declararon al unísono justo el día del quinto informe de gobierno que el género del suspirante sería femenino, al que se adicionó la encuesta realizada por el partido en la entidad respecto a este tema.
Que todo apunta a que Diego se convertirá en el segundo gobernador en decidir quién lo sucederá en el cargo en caso de que Libia ganara las elecciones, pues el primero fue Miguel Márquez Márquez el que llevó las riendas del proceso para llevar a su favorito a sentarse en la silla en la que despachaba, logrando tener el control total del camino a seguir.
La decisión está tomada y ahora se dedicará todo el esfuerzo tanto del partido como del gobierno a construir una figura que crezca en las encuestas para colocarse como favorita del electorado, el camino no será sencillo pues toda acción de la hoy titular de Desarrollo Social y Humano estará sujeta a fiscalización.
Que por otro lado, la oposición, al igual que a nivel nacional, siguen sin dar señales claras en cuanto a las definiciones a la posición más importante que en lo local está en juego como es la gubernatura del estado en donde aún no se sabe siquiera el género por el cual apostarán.
Cuando menos en el caso de Morena, nos dicen que Guanajuato al ser una de las entidades de menor posibilidad para ganar, entre las que estarán en disputa en el 2024, es altamente probable que sea un hombre quien sea su gallo, y si de encuestas hablamos el mejor colocado sigue siendo Ricardo Sheffield.
