Con la reapertura a partir el 1 de junio en cientos de lugares de nuestro país, arrancará lo que el gobierno federal ha llamado el regreso a la nueva normalidad, mal llamado, por cierto, ya que no puedes regresar a algo que es nuevo, pero, en fin, cuestión de enfoques. Esto traerá consigo varias restricciones y nuevas maneras de operar dentro de nuestro país.
La pandemia aún existe, hasta el día de hoy los casos de muertes siguen en aumento, es de esperarse que, con la reactivación y la gente de nuevo en las calles, un pico de contagios y muertes se presentará, ya no tan alto como al principio, pero de que los habrá, los habrá.
Para Hidalgo la cosa sigue según los que mandan en Plaza Juárez igual, es decir, que seguiremos confinados y solo lo esencial permanecerá abierto, sin embargo, ya veremos que pasará el lunes venidero donde a pesar de que ya se sentaron a hablar con las autoridades, docenas de comerciantes sobre todo del centro de Pachuca, han dicho que abrirán sus puertas, que no pueden ya vivir sin ingresos y con gastos que, si bien han disminuido, los siguen teniendo, recordemos que desde el 19 de marzo por orden de la alcaldía de la capital tuvieron que cerrar.
El problema de fondo ha sido que no todos han acatado las medidas prohibitivas, varios negocios no esenciales no han cerrado, siguen operando y solo cuando les dicen que la Copriseh anda haciendo recorridos, bajan sus cortinas, y esto claro que incomoda a los que si lo hacen.
Si las autoridades en estas horas venideras no dejan en claro que acuerdo habrá, es probable que el lunes tengamos algunos escenarios desagradables, porque le aseguro que varios comenzarán a operar.